Que Medico Trata Las Escaras?

Que Medico Trata Las Escaras
Un médico especializado en afecciones de la piel ( dermatólogo ).

¿Cómo se llaman los especialistas en llagas?

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  • Como Se Llama El Especialista De Llagas En La Boca?

4 respuestas Como se llama el especialista de llagas en la boca? El especialista en lesiones bucales es el estomatólogo.

¿Cómo curar una escara rápido?

Agua salina –

Para que las escaras cicatricen más rápido, se recomienda limpiarlas con agua salina. Las lesiones que no se higienizan adecuadamente son más propensas a la infección y a la inflamación. El agua salada reducirá el exceso de líquido y ayudará a deshacerse de la piel muerta que esté floja. Es uno de los mejores remedios caseros para las úlceras por presión.

  • Mezclar dos cucharadillas de sal en una taza de agua.
  • Hervir y dejar enfriar.
  • Utilizar esta solución para limpiar el área afectada del cuerpo.
  • Dejar que el área se seque completamente, luego cubrir con un vendaje.
  • Repetir un par de veces al día.
  1. .

    ¿Cómo saber si una escara está infectada?

    Cuándo consultar al médico – Si notas señales de advertencia de que tienes escaras, cambia de posición para aliviar la presión en el área. Si no ves mejoras en un plazo de 24 a 48 horas, contacta con el médico. Busca atención médica inmediata si presentas signos de infección, como fiebre, secreción de una llaga, una llaga que huela mal, cambios en el color de la piel, sensación de calor o hinchazón alrededor de una llaga.

    ¿Qué pasa con las escaras llega al hueso?

    La piel está gravemente dañada y el tejido contiguo se muere (necrosis). El músculo subyacente, o el hueso, pueden resultar asimismo dañados. Los pacientes con escaras de cuarto grado tienen un alto riesgo de desarrollar infecciones graves.

    ¿Cuándo hay que acudir al médico por una herida?

    Manejo de heridas en casa – Al tratar una herida en casa, observe si hay enrojecimiento, hinchazón y si no está sanando. El dolor que se incrementa, junto con la secreción y el calor en el sitio de la herida pueden indicar infección. Si el individuo herido empieza a tener fiebre, o se vuelve letárgico, contacte a un médico de inmediato.

    ¿Qué se le puede poner a una herida abierta?

    Una cortadura es una ruptura o abertura en la piel. También se le llama laceración. La cortadura puede ser profunda, lisa o mellada. Puede estar cerca de la superficie de la piel o afectar tejidos más profundos. Una cortadura profunda puede afectar los tendones, los músculos, los ligamentos, los nervios o el hueso. Los síntomas incluyen:

    • Sangrado
    • Problemas con el funcionamiento (movimiento) o sensibilidad (entumecimiento, hormigueo) por debajo del sitio de la herida
    • Dolor

    Se puede presentar infección en caso de algunas cortaduras y heridas penetrantes (punzantes). Las siguientes heridas son más propensas a resultar infectadas:

    • Mordeduras o picaduras
    • Punciones
    • Lesiones por aplastamiento
    • Heridas sucias
    • Heridas en los pies
    • Heridas que no se trataron con rapidez

    Si la herida está sangrando profusamente, llame al número local de emergencias, como el 911 (en los Estados Unidos). Las heridas menores y las punciones se pueden tratar en casa. Proporcionar los primeros auxilios de manera oportuna puede ayudar a prevenir una infección, y por lo tanto, acelera la curación y reduce la cantidad de cicatrices. Siga los siguientes pasos: EN CASO DE CORTADURAS MENORES:

    • Lávese las manos con jabón o un limpiador antibacteriano para prevenir una infección.
    • Luego, lave completamente la herida con agua y un jabón suave.
    • Use presión directa para detener el sangrado.
    • Aplique un ungüento antibacteriano y un vendaje limpio que no se pegue a la herida.

    EN CASO DE PUNCIONES MENORES:

    • Lávese las manos con jabón o un limpiador antibacteriano para prevenir una infección.
    • Enjuague el sitio de la punción durante al menos 5 minutos con agua corriente y luego lave con jabón.
    • Busque objetos dentro de la herida (pero no hurgue). Si encuentra alguno, no lo retire. Acuda a la sala de emergencias o centro de urgencias.
    • Si no puede ver nada dentro de la herida, pero falta un fragmento del objeto que la causó, busque también atención médica.
    • Aplique un ungüento antibacteriano y un vendaje limpio que no se pegue a la herida.
    • NO suponga que una herida menor está limpia porque no se pueden ver desechos ni suciedad dentro de ella. Lávela siempre.
    • NO respire sobre una herida abierta.
    • NO trate de limpiar una herida extensa, especialmente después de que el sangrado esté bajo control.
    • NO retire un objeto largo o profundamente incrustado. Busque atención médica.
    • NO hurgue ni retire los restos de una herida. Busque atención médica.
    • NO reintroduzca partes expuestas del cuerpo. Cúbralas con material limpio hasta que llegue la ayuda médica.

    Llame al número local de emergencias (911 en los Estados Unidos) si:

    • El sangrado es profuso o no se puede detener (por ejemplo, después de 10 minutos de presión).
    • La persona no puede sentir la zona lesionada o esta no funciona bien.
    • La persona está gravemente lesionada de otra manera.

    Llame de inmediato a su proveedor de atención médica si:

    • La herida es grande o profunda, incluso si el sangrado no es profuso.
    • La herida tiene una profundidad de más de un cuarto de pulgada (. 64 centímetros), se presenta en el rostro o llega hasta el hueso. Se pueden necesitar suturas.
    • La persona ha sido mordida por un humano o por un animal.
    • La punción o cortadura es causada por un anzuelo de pescar o un objeto mohoso.
    • Usted se paró en un clavo u otro objeto similar.
    • Un objeto o desecho se encuentra incrustado. No lo retire usted mismo.
    • La herida muestra signos de infección, como calentamiento y enrojecimiento en la zona, sensación dolorosa y pulsátil, fiebre, hinchazón, una veta roja que se extiende desde la herida o supuración similar al pus.
    • Usted no se ha hecho aplicar la vacuna antitetánica en los últimos 10 años.

    Mantenga cuchillos, tijeras, objetos afilados, armas de fuego y objetos quebradizos fuera del alcance de los niños. Cuando ellos tengan edad suficiente, enséñeles a utilizar los cuchillos, las tijeras y otras herramientas con seguridad. Verifique que usted y su hijo mantengan las vacunas al día. Generalmente, se recomienda hacerse aplicar la vacuna antitetánica cada 10 años.

    • Una punción es una herida hecha con un objeto puntiagudo como un clavo, un cuchillo o un diente afilado;
    • Las heridas por punción a menudo parecen afectar la superficie, pero también pueden extenderse a las capas de tejido más profundas;

    Heridas – cortaduras o punciones; Herida abierta; Laceración; Herida penetrante (punzante) Ball JW, Dains JE, Flynn JA, Solomom BS, Stewart RW. Skin, hair, and nails. In: Ball JW, Dains JE, Flynn JA, Solomom BS, Stewart RW, eds. Seidel’s Guide to Physical Examination.

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    ¿Cuánto tiempo tardan en curarse las escaras?

    ¿Cuánto tardan en curar? – Las úlceras de grado I tardan en curar de unos días a una semana, las de grado II suelen en curar en un periodo entre cinco días y tres meses, las de grado III de uno a seis meses y las de grado IV entre seis meses y un año, pudiendo no llegar a cicatrizar totalmente.

    ¿Cómo curar una escara infectada?

    Antibióticos – Si un paciente sufre de escaras puede recibir antibióticos para prevenir la infección bacteriana y, como precaución, prevenir también el desarrollo de una infección secundaria. La pomada antiséptica puede aplicarse también directamente en las escaras para limpiarlas de cualquier bacteria presente.

    ¿Cómo evitar escaras en coxis?

    ¿Qué pasa cuando una escara se pone negra?

    ¿Qué son las úlceras por presión? – Las úlceras por presión son áreas de la piel lesionada por permanecer en constante presión ya sea en una cama, silla u otra superficie. Las úlceras por presión también se llaman escaras. Se forman porque la sangre no circula debido a la presión que se ejerce en la zona.

    ¿Qué bacteria produce las escaras?

    Originales Análisis microbiológico de úlceras de presión en pacientes del Centro Nacional de Rehabilitación (CENARE)     Karla Villalobos-Camacho 1 Mercedes Hernández-Guerrero 2    Susana Arteaga-Acevedo 3 Federico Montero-Mejía 3 Fernando García 4   Justificación y objetivo: Las úlceras de presión son áreas localizadas de tejido necrótico que tienden a desarro-llarse cuando los tejidos blandos son comprimidos entre una prominencia ósea y una superficie externa.

    1. La principal complicación de estas lesiones es que pueden constituirse en focos primarios de infecciones bacterianas;
    2. El objetivo del presente estudio fue realizar un análisis microbiológico de las úlceras de presión en pacientes de las unidades de Lesionados Medulares, Neurotrauma y Fisiatría General del Centro Nacional de Rehabilitación para determinar cuáles bacterias aerobias predominan en dichas lesiones y determinar el perfil de susceptibilidad a los antibióticos de los aislamientos bacterianos;

    Métodos: En este estudio se incluyeron 50 muestras recolectadas de 35 úlceras de presión en un total de 22 pacientes con daños en la médula espinal atendidos durante el período de agosto de 1998 a marzo de 1999. Las muestras fueron cultivadas en medios convencionales para el aislamiento de bacterias aerobias.

    1. La identificación de los aislamientos se realizó mediante pruebas bioquímicas y el sistema Vitek®;
    2. El perfil de susceptibilidad a antibióticos se realizó mediante la técnica Kirby-Bauer con respaldo por el sistema Vitek®;

    Resultados: Los microorganismos más frecuentemente aislados fueron P. aeruginosa, Staphylococcus coagulasa-negativa, S. intermedius y A. baumannii, los cuales presentaron resistencia contra diversos antibióticos. No se encontró ningún aislamiento de Staphylococcus aureus meticilina-resistente en las lesiones estudiadas.

    A lo largo del estudio se observó variabilidad en los perfiles de resistencia en aislamientos de P. aeruginosa de un paciente durante su internamiento, lo cual sugiere adquisición de genes de resistencia y sustitución de cepas.

    Los perfiles de resistencia sugieren una posible transmisión intrahospitalaria de cepas de P. aeruginosa, Staphylococcus coagulasa-negativa y S. intermedius. Conclusiones: El presente estudio indica que la biota bacteriana encontrada en las úlceras de presión en pacientes con lesiones medulares del CENARE está constituida principalmente por P.

    aeruginosa, Staphylococcus coagulasa-negativa, S. intermedius y A. baumannii, que muestran resistencia a diversos antibióticos y que son probablemente de origen intrahospitalario. Descriptores: úlceras de presión, resistencia a antibióticos, infecciones intrahospitalarias, Acinetobacter, Pseudomonas, Staphylococcus, Enterobacteriaceae.

    Recibido: 4 de octubre de 2000. Aceptado: 17 de abril de 2001. Las úlceras de presión son áreas localizadas de tejido necrótico que tienden a desarrollarse cuando los tejidos blandos son comprimidos entre una prominencia ósea y una superficie externa por un período prolongado de tiempo.

    1. 1 Los sitios anatómicos más comunes para el desarrollo de las úlceras de presión incluyen el sacro, tuberosidades óseas, trocánter mayor, talones y maléolo lateral;
    2. Los cuatro factores involucrados con el desarrollo de estas úlceras son la presión, las fuerzas cortantes, la fricción y la humedad;

    1 Se han desarrollado varios sistemas para la clasificación de las úlceras de presión. El National Pressure Ulcer Advisory Panel (NPUAP) de los Estados Unidos ha clasificado las úlceras en cuatro grados. 1 Las úlceras de grado I se caracterizan por ser un eritema de piel intacta, que puede convertirse en una abrasión confinada a la epidermis.

    1. Si se elimina la presión la úlcera de grado I eventualmente cicatrizará;
    2. Las úlceras de grado II se caracterizan porque penetran la epidermis, la dermis y la capa grasa subcutánea subyacente y cicatrizan si se elimina la presión y se protege mediante un apósito;

    Las úlceras de grado III usualmente están infectadas y se extienden a través de la grasa subcutánea al interior del músculo. Este tipo de úlcera cicatrizará por segunda intención, dejando una escara avascular. Las úlceras de grado IV se extienden hacia el hueso, volviéndose blandas y necróticas.

    Las complicaciones más importantes de las úlceras de presión son la infección, tanto por microorganismos aerobios como anaerobios, y otras originadas de la misma, incluyendo bacteremia, osteomielitis, tractos sinusoidales, endocarditis, meningitis, artritis séptica, amiloidosis, miasis y formación de pseudoaneurisma.

    1,2,3 El objetivo de este estudio fue realizar un análisis microbiológico de las úlceras de presión en pacientes que atienden el Centro Nacional de Rehabilitación (CENARE) para determinar cuáles bacterias aerobias predominan en dichas lesiones y su perfil de susceptibilidad a diversos antimicrobianos.

    • Materiales y Métodos Pacientes y muestras: 22 pacientes, de 20 a 60 años de edad, de las Unidades de Lesionados Medulares, Neurotrauma y Fisiatría General del CENARE, quienes presentaban a su ingreso úlceras con grados de I a IV, fueron incluidos en este estudio realizado de agosto de 1998 a marzo de 1999;

    Las muestras de cada paciente se recolectaron a solicitud del médico tratante como parte del análisis rutinario y no se recolectaron muestras adicionales. El protocolo de estudio cumplió con los requerimientos del Comité de Etica y del Comité Científico del CENARE.

    A partir de 35 úlceras se recolectaron un total de 50 muestras incluyendo 1 de úlcera de grado I, 9 de úlceras de grado II, 17 de úlceras de grado III y 24 de úlceras de grado IV. El grado de las úlceras se determinó siguiendo los criterios del NPUAP.

    Las úlceras se encontraron más frecuentemente en la región sacra (37. 1%), la región isquiática (20. 1%), piernas (17. 1%), glúteos (14. 3%) y pies (8. 8%). Seis pacientes presentaron dos o más úlceras. A siete pacientes que permanecieron durante varios meses internados en el transcurso del estudio se les recolectaron muestras de las respectivas lesiones una vez al mes.

    1. Procesamiento de las muestras: Las muestras de las úlceras se recolectaron por medio de raspados vigorosos del fondo de la lesión utilizando tres torundas de algodón estériles;
    2. 4 Una primera torunda se utilizó para la inoculación de placas de agar sangre, agar MacConkey y agar manitol sal, la segunda para la preparación de un frotis y tinción de Gram y la tercera se inoculó en un tubo con caldo tioglicolato como cultivo de respaldo;

    Las placas de agar sangre fueron incubadas bajo condiciones capnofílicas por 18-24 horas a 35°C y los otros medios de cultivo se incubaron en aerobiosis por 24 horas a 35°C. Se procesaron aquellos aislamientos a partir de medios de cultivo con uno o dos morfotipos bacterianos predominantes y se descartaron medios de cultivo con tres o más morfotipos coloniales.

    1. La identificación de los aislamientos bacterianos se determinó mediante pruebas bioquímicas,5,6 mientras que las pruebas de susceptibilidad a los antimicrobianos (PSA) se realizaron mediante la técnica de difusión con disco;

    7 En algunos casos, la idenficación de las especies aisladas y las PSA se respaldaron en el sistema automatizado Vitek®. Para las bacterias Gram-negativas se probaron amikacina, cefalotina, cefotaxime, ceftaxidima, ceftriaxone, ciprofloxacina, gentamicina, imipenem y tetraciclina, mientras que para las bacterias Gram-positivas se utilizaron amikacina, cefalotina, eritromicina, gentamicina, oxacilina, penicilina, tetraciclina y vancomicina.

    Análisis estadístico: Se aplicó una prueba de hipótesis para la comparación de proporciones muestrales para el análisis de los resultados. Resultados De las 50 muestras de úlceras de presión analizadas se obtuvieron cultivos positivos en 45, siendo 5 muestras negativas por bacterias aerobias.

    En 24 muestras (48%) se obtuvieron cultivos con un solo microorganismo, mientras que en 21 muestras (42%) se cultivaron dos o más microorganismos diferentes. Como se muestra en el Cuadro 1 , se lograron obtener 68 aislamientos, siendo Pseudomonas aeruginosa la que presentó mayor porcentaje de aislamiento. Los aislamientos de Staphylococcus coagulasa-negativa no fueron identificados a nivel de especie. Adicionalmente se encontraron otras especies de la familia Enterobacteriaceae incluyendo Escherichia coli, Klebsiella y Enterobacter , mientras que Staphylococcus aureus fue aislado solamente en el 6% de las muestras analizadas. Al comparar los microorganismos aislados según el grado de úlcera, se observó que la biota bacteriana es similar para las úlceras de grado III y IV ( Figura 1 ), pero las especies de la familia Enterobacteriaceae fueron más frecuentemente aisladas de las úlceras de grado IV (25%) que de las úlceras de grado III (13. 8%) (p < 0. 05). Además no se aisló S. aureus de las úlceras de grado IV. Se obtuvo un aislamiento de Staphylococcus coagulasa-negativa de la única muestra recolectada a partir de una úlcera de grado I, mientras que a partir de las úlceras de grado II solamente se aislaron A. baumannii y Staphylococcus coagulasa-negativa en asociación. De los 21 aislamientos obtenidos de P. aeruginosa , 16 de ellos se aislaron en asociación con otras bacterias, tanto con diversas especies de Staphylococcus como con especies de la familia Enterobacteriaceae , o con ambas ( Cuadro 2 ).

    1. Otras bacterias aisladas fueron, en orden decreciente, Staphylococcus coagulasa-negativa, S;
    2. intermedius y Acinetobacter baumannii;
    3. Los tres aislamientos de S;
    4. aureus recuperados en este estudio se obtuvieron en asociación con P;

    aeruginosa a partir de úlceras de grado III. Los resultados de las PSA se muestran en los Cuadros 3 y 4. Para P. aeruginosa se observaron porcentajes altos de resistencia contra amikacina, cefotaxima, ceftazidima, ciprofloxacina y tetraciclina. En los aislamientos de A. baumannii se observaron también porcentajes altos de resistencia contra todos los antibióticos ensayados, con excepción de imipenen.

    • Para K;
    • ozaenae se observó resistencia total contra amikacina y ceftazidima y el 50% de los aislamientos mostraron resistencia contra ciprofloxacina y tetraciclina, mientras que contra ceftriaxona, gentamicina e imipenen se observó un 100% de sensibilidad;

    En los aislamientos de Staphylococcus coagulasa-negativa se observaron altos porcentajes de resistencia contra la mayoría de los antibióticos ensayados. De estos aislamientos, 16 fueron resistentes a la oxacilina y a la eritromicina y 15 a la penicilina y gentamicina.

    • Para las cepas de S;
    • intermedius se evidenció un 87;
    • 5% de resistencia contra la eritromicina y la penicilina y un 62;
    • 5% de resistencia contra la oxacilina;
    • Los tres aislamientos de S;
    • aureus fueron resistentes a la penicilina, dos de los cuales mostraron también resistencia contra la eritromicina, mientras que todos fueron sensibles a los restantes antibióticos ensayados;

    Ninguno de los aislamientos de Staphylococcus mostró resistencia contra la vancomicina. Los patrones de susceptibilidad fueron utilizados para la diferenciación de los aislamientos de una misma especie bacteriana. En dos pacientes se aisló P. aeruginosa en forma repetitiva en diferentes fechas a lo largo del estudio. En uno de ellos se aisló P. aeruginosa a partir de úlceras ubicadas en diversos sitios anatómicos en tres diferentes fechas. Durante su hospitalización este paciente recibió tratamiento con amikacina, cefalexina, cefalotina, ceftaxidime y ciprofloxacina para el control de las infecciones de sus úlceras de presión.

    Tres de los cuatro aislamientos de la primera fecha mostraron patrones de susceptibilidad muy similares entre sí y distintos del cuarto aislamiento. Los tres aislamientos de la segunda fecha mostraron patrones muy similares entre sí y se diferencian de los de la primera fecha en la resistencia contra ceftriaxona, ceftaxidima y cefotaxima.

    Los dos aislamientos de la tercera fecha mostraron patrones de susceptibilidad diferentes entre sí. El aislamiento del isquión derecho presentó el mismo patrón de resistencia que los aislamientos de la región sacra y del glúteo izquierdo de la primera fecha.

    Estos resultados indican, primero, la presencia de diferentes cepas de P. aeruginosa en diferentes sitios anatómicos, segundo, la posible adquisición de resistencia en el transcurso de la persistencia crónica de la bacteria y, tercero, la sustitución de cepas por otras con patrones de susceptibilidad diferentes.

    Los patrones de susceptibilidad de los diferentes aislamientos de una misma especie fueron comparados entre sí con el fin de trazar posibles rutas de transmisión intrahospitalaria. Aislamientos de P. aeruginosa , Staphylococcus coagulasa-negativa y S. intermedius obtenidos de pacientes que se encontraban en diferentes salones de la institución mostraron patrones de susceptibilidad prácticamente idénticos, sugiriendo una transmisión intrahospitalaria.

    Discusión La infección por diferentes tipos de microorganismos es la complicación más frecuentemente asociada a las úlceras de presión. La colonización representa el estado inicial del proceso infeccioso.

    En este estudio se realizó un análisis microbiológico para determinar la biota bacteriana aerobia presente en las úlceras de presión en pacientes del CENARE. aeruginosa y especies de Staphylococcus coagulasa-negativa fueron las bacterias más frecuentemente aisladas de las lesiones.

    Otras especies encontradas fueron A. baumannii, S. intermedius, S. aureus y de la familia Enterobacteriaceae. Aunque en la mayoría de las muestras (48%) se logró aislar una única bacteria, en 42% de las muestras analizadas se encontraron dos o tres bacterias diferentes.

    Es interesante destacar el hecho que se observaron algunas asociaciones de microorganismos, como la de P. aeruginosa con Staphylococcus coagulasa-negativa. Sin embargo, el significado clínico o epidemiológico de estas asociaciones bacterianas no se determinó y será objetivo de futuros estudios.

    Todos las especies bacterianas encontradas en este estudio son reconocidas por constituir parte de la biota indígena (flora normal) del ser humano en algún sitio anatómico, sea a nivel de piel o a nivel del tracto intestinal.

    8-10 Esto indica que el origen de estas bacterias podría ser de carácter endógeno, de la propia flora del paciente, o bien, adquirido de otros pacientes o del personal médico-asistencial de la institución. En efecto, el hallazgo de aislamientos de una misma especie bacteriana con patrones de susceptibilidad semejantes en diferentes pacientes sugiere fuertemente su adquisición nosocomial y la diseminación de microorganismos multirresistentes por medio del personal del hospital.

    1. Por otra parte, se demostró una variación de las características de resistencia en aislamientos de P;
    2. aeruginosa hallados en un paciente, ya sea debido a la adquisición de nuevos mecanismos de resistencia o al recambio de cepas luego de un tratamiento inicialmente exitoso;

    La mayoría de los aislamientos presentan diversos grados de resistencia contra diferentes antibióticos, lo cual es frecuente en bacterias de origen intrahospitalario. Los aislamientos de P. aeruginosa mostraron un porcentaje alto de resistencia contra aminoglicósidos, b-lactámicos y ciprofloxacina, mientras que los de A.

    1. baumannii encontrados en las muestras analizadas mostraron resistencia total contra aminoglicósidos, cefotaxima, ceftazidima, ciprofloxacina y tetraciclina;
    2. Aunque fueron relativamente pocos los aislamientos de P;

    aeruginosa y A. baumannii que mostraron resistencia contra imipenem, su hallazgo es de gran importancia por ser éste una de las pocas alternativas terapéuticas para el tratamiento de las infecciones por cepas multirresistentes de estas dos especies. La resistencia a imipenen en esas dos especies se debe a la producción de b-lactamasas con la capacidad de hidrolizar carbapenems.

    11,12 A A. baumannii se le considera actualmente como un agente emergente de infecciones nosocomiales, particularmente en las unidades de cuidados intensivos, donde el uso de antimicrobianos es intenso y el individuo presenta una mayor susceptibilidad a las infecciones.

    13 Así, la ocurrencia de P. aeruginosa y, principalmente, A. baumannii multirresistentes en las muestra analizadas debe ser tomada en consideración para el tratamiento empírico, de los pacientes con úlceras de presión en el CENARE, incluyendo dos o más antibióticos.

    Aunque en el presente estudio no se encontró, S. aureus meticilina-resistente (MRSA) es también un importante agente de infecciones nosocomiales. 14 Recientemente, la aparición de cepas de MRSA con sensibilidad disminuida a la vancomicina a planteado serios problemas en el tratamiento de estas infecciones nosocomiales.

    15 Afortunadamente, no se detectó ningún fenotipo de susceptibilidad disminuida a la vancomicina en los aislamientos de Staphylococcus aisladas. Sin embargo, otras especies de Staphylococcus meticilina- resistente fueron encontrados con una frecuencia relativamente alta.

    Aunque a menudo las diversas especies de Staphylococcus coagulasa-negativa se consideran erróneamente como contaminantes, muchas especies del grupo, como S. epidermidis y S. haemolyticus , son ahora reconocidas como patógenos importantes, particularmente en ambientes intrahospitalarios.

    16 La resistencia a antibióticos b-lactámicos en Staphylococcus se debe a la producción de enzimas con actividad b-lactamasa o de una proteína fijadora de penicillina denominada PBP2a (del inglés penicillin-binding proteins [PBP]) con actividad de serina- transferasa que muestra baja afinidad a antibióticos b-lactámicos.

    17,18 En la gran mayoría de los casos, la producción de PBP2a, codificada por el gen mec A, confiere resistencia prácticamente contra todos los antibióticos b-lactámicos, incluyendo aquellos que son resistentes a b-lactamasa, 17 como meticilina y oxacilina.

    Recientemente se ha reportado un brote causado por una cepa de S. aureus expresando el inusual fenotipo penicilina-sensible/meticilina-resistente. 19 Esta cepa posee el gen mec A pero no produce b-lactamasas. Un hallazgo interesante del presente estudio fue un aislamiento de Staphylococcus coagulasa-negativa mostrando también este fenotipo tan poco usual.

    1. Aunque las bases moleculares de este fenotipo no están aún elucidadas, es probable que sea el resultado de alguna mutación en mec A que halla aumentado su afinidad a la penicilina manteniendo una baja afinidad a la meticilina;

    Los resultados del presente estudio indican, en conjunto, que la biota bacteriana aerobia de las úlceras de presión en pacientes del CENARE está constituida principalmente por microorganismos multirresistentes. Esto puede ser el resultado de la fuerte presión selectiva sobre las bacterias que constituyen la biota indígena por los tratamientos a los cuales están sometidos los pacientes con hospitalización reiterada o prolongada, lo cual favorece la adquisición horizontal de genes de resistencia.

    1. Alternativamente, algunos microorganismos pueden ser residentes intrahospitalarios que han adquirido los mecanismos de resistencia a lo largo del tiempo y colonizan el personal médico asistencial, el cual constituye la principal fuente de infección para los pacientes;

    Adicionalmente, los microorganismos multirresistentes causantes de infecciones de úlceras de presión y otras infecciones subsecuentes, representan un reto para el tratamiento de dichas lesiones y el bienestar de los pacientes. Agradecimientos Los autores agradecen al Dr.

    Gerardo Díaz Williams y a los revisores por sus sugerencias al manuscrito   Abstract Background and aim: The pressure sores are areas of necrotic tissue that develop when soft tissues are compressed between a bone and an external surface.

    Bacterial infections are the main complication of the pressure sores. The aim of this study was to perform a microbiological analysis of pressure sores in order to determine the bacterial aerobic flora in patients admitted to the units of Medullary Injuries, Neurotrauma and General Fisiatry of the National Center of Rehabilitation and the antimicrobial susceptibility profiles of the isolates.

    Methods: 50 samples collected from 35 pressure sores in 22 patients, during the period from August 1998 to March 1999, were included in this study. Samples were cultured in conventional media for the isolation of aerobic bacteria.

    Identification of isolates were performed by standard biochemical tests and Vitek® system. Susceptibility tests were carried out by disk diffusion test and the Vitek® system. Results: P. aeruginosa, coagulase-negative Staphylococcus, S. intermedius and A. baumannii were the most frequently isolated aerobic bacterial species, which showed resistance against several antibiotics.

    No methicillin-resistant Staphylococcus aureus was found. Several isolates of P. aeruginosa were isolated from different sores in a single patient. These isolates showed variability in the resistance patterns during the hospitalization, suggesting acquisition of resistance genes and reinfection with phenotypically distinguishable strains.

    The observed resistance patterns suggest a putative intrahospitalary transmission of P. aeruginosa, coagulase-negative Staphylococcus and S. intermedius. Conclusions: Multiresistant P. aeruginosa, coagulase-negative Staphylococcus, S. intermedius and A. baumannii are the main bacterial components of the biota in the ulcer sores in patients of CENARE.

    Phenotypic traits suggest intrahospitalary dissemination of these bacteria among patients and institutional measures should be implemented to control such dissemination and to improve the use of antimicrobials against multiresistant bacteria.

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    3 Servicio de Fisiatría, Centro Nacional de Rehabilitación. 4 Centro de Investigación en Enfermedades Tropicales, Facultad de Microbiología, Universidad de Costa Rica. Correspondencia: Fernando García, Centro de Investigación en Enfermedades Tropicales, Facultad de Microbiología, Universidad de Costa Rica, 2060 Ciudad Universitaria Rodrigo Facio, San José, Costa Rica.

    Fax (506) 225-2374. E-mail: [email protected]. ucr. ac. cr ..

    ¿Cómo se empiezan a formar las escaras?

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    Empezamos hoy el primero de muchos temas de carácter asistencial en los que pretendo dar a conocer los problemas habituales que sufre y padece una persona con Alzheimer. La idea es presentar el problema, sus causas y las ayudas técnicas o ayudas para la vida diaria que teneis a vuestro alcance para mejorar la calidad de vida del paciente.

    El tema de hoy son las escaras o ulceras por presión , un problema muy frecuente que casi todos los enfermos padecen al final de la 2º etapa cuando empieza a aparecer la rigidez y los problemas de movilidad y sobre todo en la 3º etapa cuando la persona ya ha perdido completamente la movilidad y la sensibilidad.

    Las escaras o ulceras por presión se producen cuando hay una presión constante y excesiva sobre la piel y los tejidos. Pensar en una persona que esta en la misma posición prácticamente todo el dia y que no tiene sensibilidad ni capacidad para quejarse o cambiar de posición.

    Debido a esta presión constante, los vasos sanguíneos que riegan la piel y los tejidos quedan oprimidos, de esta forma no llega la sangre a las células y estas mueren. Tecnicamente se denomina isquemia y como consecuencia hay una muerte celular que provoca una lesión. El problema de falta de movilidad es la principal razón, pero suelen añadirse otras causas:

    • poca o nula realización de cambios posturales, se recomienda cambiar de posición a la persona cada 3 o 4 horas.
    • dieta inadecuada, si los tejidos no reciben los nutrientes necesarios se vuelven más frágiles.
    • incontinencia que incrementa el riesgo de sufrir escaras por añadir el componente de la humedad
    • falta de higiene que provoca que el sudor y los restos de orina o excrementos irriten la piel ya débil de los ancianos

    ¿Cómo saber el grado de una escara?

    Grados de las escaras Si la zona oscura o enrojecida en la piel y no desaparece pasados los 30 segundos después de ejercer la presión, estamos ante una úlcera de grado I.

    ¿Cuáles son los grados de escaras?

    Grados de escaras – Las escaras pueden disminuir de forma considerable la calidad de vida. Los profesionales de la salud utilizan un sistema de clasificación para describir la gravedad y los grados de las escaras. Por lo tanto, se distinguen 4 categorías:

    • Grado 1 : una escara de primer grado es el tipo de lesión más superficial. El área de la piel afectada aparece descolorida y rojiza en pacientes blancos y amoratada o azulada en pacientes con la piel más oscura. En una escara de grado 1, la piel permanece intacta, pero puede doler, picar y resultar o bien tibia y mullida o bien dura al tacto.
    • Grado 2 : en las úlceras por presión de segundo grado, parte de la superficie externa de la piel, es decir, la epidermis, o la parte más interna de la piel o dermis, resulta dañada. Esto provoca una pérdida de tejido cutáneo. La úlcera aparece como una herida abierta o ampolla.
    • Grado 3 : en esta categoría la pérdida de la piel se produce en todo el grosor de la misma. Además, el tejido subyacente también se encuentra dañado. Sin embargo, ni los músculos ni los huesos presentan daños. La escara se presenta como una herida profunda, ahuecada.
    • Grado 4 : de los 4 grados de escaras que hay, este es el más grave. En esta situación la piel está muy dañada y el tejido contiguo sufre necrosis, es decir, se muere. Además, el músculo subyacente o el hueso pueden verse afectados. Los pacientes con este tipo de úlceras por presión presentan un alto riesgo de desarrollar infecciones graves.

    ¿Cuál es la mejor crema para las ulceras varicosas?

    ¿Cuáles son los cuidados de las ulceras por presion?

    La presión constante en la piel provoca la compresión de pequeños vasos sanguíneos, que son los que proveen a la piel de oxígeno y nutrientes. Cuando la piel no recibe estas sustancias se produce la muerte de los tejidos. Cualquier persona que debe permanecer largo tiempo encamada puede padecer las úlceras por presión. ¿Necesita que le ayudemos? CUIDADOS DE LA PIEL

    • Se debe revisar la piel, por lo menos una vez al día. Cualquier área que permanezca enrojecida, tras unos minutos de haber cambiado de postura, tiene que llamar su atención.
    • Fíjese bien en las zonas típicas de presión: talones, glúteos, espalda, codos y parte posterior de la cabeza.
    • Mantenga la piel limpia y seca. Debe limpiar la piel tan pronto como se ensucie, es conveniente hacerlo con un trapo o esponja suave.
    • Debe usar jabones que no irriten la piel. Use agua tibia, no muy caliente.
    • No utilice sobre la piel ningún tipo de alcohol
    • Aplique cremas hidratantes procurando que se absorban completamente.
    • Evite la sequedad de la piel: use cremas o aceites hidratantes, evite el aire frío o seco.
    • Use ropa de cama que sea de tejidos naturales. Mantenga la ropa seca, limpia y sin arrugas.
    • Coloque en las zonas típicas de presión protectores o apósitos acolchados.
    • No realice masajes sobre prominencias óseas.

    INCONTINENCIA

    • Evite la humedad de la orina, heces, sudor o supuración. Cuando esto ocurra debe limpiar muy bien la piel, secándola luego con un paño suave a golpecitos, nunca frotando.
    • Use medidas para controlar la incontinencia de esfínteres: pañales, sondas, colectores, etc.

    MOVILIZACIÓN

    • A los pacientes encamados es necesario, cada 2-3 horas, moverles alguna zona, haciéndolo siguiendo un orden.
    • En pacientes que permanecen largo tiempo sentados, si es posible, es conveniente enseñarle a se movilice cada 12-30 minutos.
    • Procure mantener la alineación corporal para así distribuir el peso de manera uniforme.
    • Evite el contacto directo de las prominencias óseas entre sí, por ejemplo tobillos, rodillas, etc.
    • Evite el arrastre, si tiene que moverlo pida ayuda a otra persona para no arrastrarlo por la cama.
    • Si es necesario eleve la cabecera de la cama lo mínimo posible y durante el tiempo mínimo preciso.
    • Use dispositivos que disminuyan al máximo la presión: almohadas de latex, colchones anti-escaras (de aire, agua o latex), almohadas, protectores de talones y codos, etc. (son materiales complementarios, no sustituyen nunca a los cambios posturales).

    Una de las causas que ayuda a la aparición de las úlceras y a su difícil curación, es la frecuente carencia de proteínas que normalmente existe en la alimentación de las personas mayores, ya que principalmente por falta de apetito o dificultad en la masticación, no suelen comer excesiva carne, huevos o pescado, alimentos ricos en proteínas. Por eso la mejor medida es prevenir las úlceras por presión. Los lugares más frecuentes donde se presentan úlceras por presión son las prominencias óseas como codos, talones, caderas, tobillos, hombros, espalda y parte posterior de la cabeza..

    ¿Qué es bueno para las ulceras por presion?

    La mayoría de las úlceras por presión se limpian con agua potable (es decir, el agua apta para el consumo) o suero salino fisiológico.

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