IBUPROFEN EN VADEMECUM IQB DESCRIPCION El ibuprofeno es un derivado del ácido propiónico que posee propiedades analgésicas, antiinflamatorias y antipiréticas. El efecto terapéutico, como antiinflamatorio no esteroideo que es, deriva de su actividad inhibitoria de la prostaglandín-sintetasa.
Mecanismo de acción: como todos los antiinflamatorios no esteroidicos de la familia de los ácidos aril-propiónicos, el ibuprofeno inhibe la acción de las enzimas COX-1 y COX-2. Los efectos anti-inflamatorios del ibuprofeno son el resultado de la inhibición periférica de la síntesis de prostaglandinas subsiguiente a la inhibición de la ciclooxigenasa.
El ibuprofen inhibe la migración leucocitaria a las áreas inflamadas, impidiendo la liberación por los leucocitos de citoquinas y otras moléculas que actúan sobre los receptores nociceptivos. El ibuprofeno, como otros AINEs, no altera el umbral del dolor ni modifica los niveles de prostaglandinas cerebrales, concluyéndose que sus efectos son periféricos.
La antipiresis es consecuencia de la vasodilatación periférica debido a una acción central sobre el centro regulador de la temperatura del hipotálamo. Farmacocinética: El ibuprofeno se absorbe rápidamente en el tracto gastrointestinal, presentándose picos de concentraciones plasmáticas 1-2 horas después de la administración.
Su vida media de eliminación es de unas 2 horas aproximadamente. El ibuprofeno se une fuertemente a las proteínas plasmáticas. El ibuprofeno se metaboliza en el hígado, dando lugar a 2 metabolitos inactivos que, junto con el ibuprofeno, se excretan por vía renal bien como tales o como metabolitos conjugados.
- La xcreción renal es rápida y completa.
- La farmacocinética de los gránulos de ibuprofeno es comparable a la de los comprimidos, por lo que no debe haber diferencias en la pauta de utilización clínica de ambas presentaciones.
- Toxicidad: en los estudios de toxicidad los efectos tóxicos observados coinciden con los de otros antiinflamatorios no esteroideos.
El ibuprofeno no resultó teratogénico en diferentes especies animales. Asimismo, tanto los estudios de mutagénesis como los de cancerogénesis dieron resultados negativos. INDICACIONES Y POSOLOGIA Tratamiento de artritis reumatoide :(incluyendo artritis reumatoide juvenil), espondilitis anquilopoyética, artrosis y otros procesos reumáticos agudos o crónicos.
Tratamiento de lesiones de tejidos blandos como torceduras o esguinces. Tratamiento de procesos dolorosos de intensidad leve y moderada como el dolor dental, el dolor postoperatorio y tratamiento sintomático de la cefalea. Alivio de sintomatología en dismenorrea primaria. Tratamiento sintomático de la fiebre en cuadros febriles de etiología diversa.
La posología deberá ajustarse a la intensidad del cuadro a tratar, empleando la mínima dosis que produzca remisión de la sintomatología. Administración oral:
Adultos: Uso como antiinflamatorio: la dosis recomendada es de 1.200-1.800 mg/día administrados en varias dosis. Algunos pacientes pueden ser mantenidos con 800-1.200 mg. La dosis total diaria no debería exceder de 2.400 mg. Uso como analgésico y antipirético: la dosis recomendada es de 400-600 mg cada 4-6 horas dependiendo de la intensidad del cuadro y de la respuesta al tratamiento. Uso como antidismenorreico: el tratamiento debe comenzar al iniciarse el dolor. La dosis usual es de 400-600 mg, cada 4-6 horas, dependiendo de la intensidad de los síntomas. Niños: El uso de ibuprofen no es adecuado en niños menores de 12 años. Ancianos. No se requieren modificaciones especiales en la posología.
En caso de insuficiencia renal se recomienda individualizar la dosis. CONTRAINDICACIONES Y PRECAUCIONES El ibuprofeno está contraindicado en pacientes con úlcera péptica activa y en pacientes que hayan presentado reacciones de hipersensibilidad (asma, rinitis o urticaria) con el ibuprofeno, el ácido acetilsalicílico u otros antiinflamatorios no esteroideos.
El ibuprofen debe administrarse con precaución en los siguientes casos: Pacientes que padezcan o tengan antecedentes de asma bronquial, ya que se ha notificado que el ibuprofeno puede provocar broncospasmo en estos pacientes. Pacientes con antecedentes de enfermedad gastrointestinal.
- Pacientes con alteraciones renales, hepáticas o cardiacas, ya que el uso de antiinflamatorios no esteroideos puede producir deterioro de la función renal.
- En este tipo de pacientes debe utilizarse la dosis más baja y monitorizarse la función renal.
- Pacientes con antecedentes de insuficiencia cardiaca o hipertensión ya que se ha notificado asociación entre edema y administración de ibuprofeno.
: IBUPROFEN EN VADEMECUM IQB
¿Qué tipo de inhibidor es el ibuprofeno?
Resumen Una de las principales características de una buena combinación farmacológica es la sinergia. Existe en el mercado, desde hace relativamente poco tiempo, una nueva combinación analgésica de ibuprofeno, un antiinflamatorio no esteroideo (AINE) muy usado en la práctica médica diaria por su buen cociente de eficacia y seguridad, y codeína, un opiáceo menor muy utilizado como segundo escalón analgésico en combinación.
Hemos realizado una revisión en MEDLINE de los principales estudios publicados en la literatura médica en cuanto a eficacia y seguridad de ambos principios activos por separado, para finalizar con una aproximación tanto de la experiencia clínica mostrada en estudios con combinaciones analgésicas en general, como en las hipótesis de un posible sinergismo entre AINE y opiáceos.
Palabras clave: Ibuprofeno Codeína Sinergismo Abstract One of the principal characteristics of a good pharmacological combination is drug synergism. A new analgesic combination of ibuprofen, a non-steroidal anti-inflammatory drug, used frequently in clinical practice due to good quotient of efficacy and safety, and codeine, a minor opiate used very much as second analgesic step in combination, has recently come on the market.
We have conducted a review in MEDLINE of the principal studies published in the medical literature as regards the efficacy and safety of both drugs separately and finally, a review of the clinical experience showed in studies with analgesic combinations in general and on the hypothesis of a possible drug synergism between NSAIDs and Opiates.
Keywords: Ibuprofen Codeine Drug Synergism Texto completo Introducción En el tratamiento del dolor, usar una combinación de analgésicos con mecanismos de acción diferentes ofrece varias ventajas con relación a utilizar solamente un principio activo de forma aislada.
Por un lado, el hecho de combatir el dolor a través de caminos diferentes es una estrategia de optimización en la eficacia terapéutica, y por otro, en el caso de un posible sinergismo, obtendríamos la misma eficacia con dosis menores de ambos principios activos, con lo que se minimizaría la aparición de efectos adversos, optimizando así la seguridad.
El beneficio de la combinación analgésica ha sido probado en numerosos ensayos clínicos y son muchas las sociedades y asociaciones que los recomiendan en sus guías clínicas de consenso 1, En la práctica clínica habitual, la combinación de analgésicos es un hecho bien conocido y extendido, sobre todo en el ámbito de los cuidados post-operatorios y en el dolor crónico 2,
La elección de una determinada combinación analgésica no es caprichosa. Lo adecuado sería unir moléculas que presenten mecanismos de acción efectivos pero diferentes y, además, que no compitan entre ellos metabólicamente. Lo ideal sería que, además de esto, tuvieran sinergia farmacológica, es decir, que el efecto resultante supere a la simple suma del efecto de los 2 fármacos por separado.
En el presente artículo se revisa la combinación de ibuprofeno (un antiinflamatorio no esteroideo muy utilizado por su notable cociente eficacia/seguridad) y codeína (un opiáceo menor, que junto con tramadol, lidera el segundo escalón analgésico del conocido protocolo de la OMS).
Mecanismo de acción del ibuprofeno El ibuprofeno es un fármaco antiinflamatorio no esteroideo, derivado del ácido propiónico, cuyo principal mecanismo antipirético, analgésico y antiinflamatorio radica en el bloqueo de la síntesis de prostaglandinas a través de la inhibición de las isoformas de la enzima ciclooxigenasa 1 y 2 (COX-1 y COX-2).
El ibuprofeno se une de forma reversible a la COX-1, a diferencia de la aspirina que se une de forma irreversible. La COX-1 y la COX-2 tienen el mismo peso molecular y son muy similares en su estructura. Sin embargo, el sitio activo de la COX-1 es más pequeño que el de la COX-2.
Esto implica que casi todos los AINE inhibidores de la COX-1 lo serán también de la COX-2. Por el contrario, muchos inhibidores de la COX-2 tendrán escaso poder bloqueante sobre la COX-1 3, La inhibición de las COX no explica del todo el efecto antiinflamatorio de los AINE, ya que al inhibir dichas enzimas se evita cierto grado de vasodilatación y quimiotaxis, pero no todos los procesos que ocurren durante la inflamación.
Además, existen prostaglandinas con cierta actividad antiinflamatoria. Por tanto, para explicar el fenómeno antiinflamatorio de los AINE debemos tener en cuenta que actúan otros mecanismos implicados además de la inhibición de las COX. Por ejemplo, algunos AINE inhiben la expresión o la actividad de algunas moléculas de adhesión que participan en el fenómeno inflamatorio.
- Otros AINE, sobre todo los salicilatos, producen una inhibición de ciertos factores de transcripción que activan una serie de mediadores inflamatorios, como puede ser la interleucina 1 (IL-1) o el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α).
- Otra parte significativa del efecto antiinflamatorio de los salicilatos se debe a la inducción de la liberación de adenosina, que posee propiedades antiinflamatorias.
El mecanismo de acción analgésico de los AINE probablemente sea también consecuencia directa de la inhibición de la síntesis de prostaglandinas 3, Inicialmente fue propuesto un mecanismo de acción exclusivamente periférico, inhibiendo la formación de prostaglandinas en el tejido periférico inflamado.
- Sin embargo, desde hace bastantes años (Hanzlick, 1926) se barajaba la posibilidad de un mecanismo central analgésico.
- La expresión en el cerebro y medula espinal de las isoformas COX-1 y COX-2 ha permitido dar mayor fiabilidad a dicha hipótesis 4,5,
- Más recientemente se ha sugerido un mecanismo central en la médula espinal no solamente relacionado con el bloqueo de la síntesis de prostaglandinas a nivel central, sino también con posibles mecanismos adicionales de neuromodulación no relacionados con la inhibición de la ciclooxigenasa 6,7,
En cuanto al mecanismo de acción antipirético, los AINE suprimen la elevación de prostaglandinas en el hipotálamo. Se sabe que en los procesos febriles se liberan una serie de citocinas. Estas citocinas incrementan la síntesis de prostaglandina E 2 (PGE 2 ) en el área hipotalámica y otras zonas del sistema nervioso central (SNC).
- La PGE 2 aumenta el AMP cíclico (AMPc), estimulando al hipotálamo para elevar la temperatura corporal.
- Por lo tanto, al disminuir la producción de prostaglandinas por parte de los AINE, disminuye la fiebre.
- Mecanismo de acción de la codeína La codeína es uno de los alcaloides que se encuentra en el opio.
Su estructura original es la metilmorfina. Su efecto analgésico se basa en la capacidad del individuo para metabolizar la codeína (desmetilación) y convertirla en morfina. Como promedio, esto solamente ocurre en el 10% de la codeína ingerida. Por eso, la potencia analgésica de la codeína es unas diez veces menor que la de la morfina 3,
Además, al ser este proceso de desmetilación saturable, la codeína es considerada un opiáceo menor, con un techo analgésico demostrado en curvas de dosis/eficacia alrededor de los 60 mg por vía parenteral, lo que quiere decir que a partir de dicha dosis no se conseguía aumentar el efecto analgésico aunque aumentáramos la dosis 8,
Es por ello que la codeína es considerada un fármaco con un perfil beneficio/riesgo positivo para el tratamiento de los dolores de intensidad suave-moderada con una menor probabilidad de efectos adversos si lo comparamos con los opiáceos mayores (morfina, fentanilo, etc.).
Aunque desde hacía muchos años ya existía la hipótesis de que el mecanismo de acción analgésico de los opiáceos se debía a una unión agonista sobre unos receptores, no fue hasta finales de los ochenta cuando se pudieron caracterizar 9, Estos receptores opioides (μ, δ y κ) no solamente se encuentran a nivel central, ya que algunos autores han demostrado la presencia de los mismos en las terminaciones periféricas de las neuronas sensoriales 10,
Aunque los estudios de unión de receptores permitieron postular la existencia de varios subtipos de receptores opioides, los datos obtenidos a partir de la clonación de los diferentes receptores no han permitido confirmar la existencia de los mencionados subtipos.
- La explicación podría ser por diferencias de acoplamiento una vez producido el ARN mensajero (ARNm).
- Los receptores opioides pertenecen a la familia de receptores con 7 segmentos transmembrana, acoplados a proteínas G.
- Las neuronas opioides liberan péptidos endógenos que se unen a receptores neuronales de localización presináptica y bloquean la transmisión del estímulo nervioso.
La unión del opioide al receptor provoca, mediante la proteína G que actúa como segundo mensajero, la inhibición de la adenilciclasa encargada de transformar el ATP en AMP cíclico (AMPc), disminuyendo así las concentraciones de AMPc intracelular. Además, los receptores opioides se relacionan con la apertura de canales de potasio y cierre de canales de calcio.
Al abrirse los canales de potasio, se producirá una hiperpolarización de membrana, que provocará una reducción tanto en la descarga de potenciales de acción, como en la duración de los mismos y, en definitiva, una disminución de la capacidad del terminal presináptico para la liberación de neurotransmisores (como, por ejemplo, la sustancia P) 11,
Eficacia y seguridad del ibuprofeno El ibuprofeno, como todos los AINE, es antipirético, analgésico y antiinflamatorio (con excepción del paracetamol, que no es antiinflamatorio). La reacción adversa más común de los AINE (exceptuando el paracetamol) es la gastropatía por afectación de la mucosa gastrointestinal 3,
- Ibuprofeno es uno de los AINE que posee un menor riesgo de gastropatía y nefropatía.
- Algunos estudios han citado un ligero incremento del riesgo cardiovascular con ibuprofeno aunque más bajo comparado con los coxibs o diclofenaco 12,
- Además, el inicio del efecto analgésico parece ser más lento para los inhibidores de la COX-2 13,
La eficacia analgésica de ibuprofeno ha sido estudiada en numerosos trabajos ( tabla 1 ). Existen estudios que afirman que ibuprofeno es superior como analgésico que la aspirina en cirugía del tercer molar y post-episiotomía 14, Otros trabajos confirman que el ibuprofeno es ligeramente más eficaz que el paracetamol en el tratamiento de la fiebre en niños 15,
- Un meta-análisis reafirma lo anterior exponiendo que el ibuprofeno en niños es igual de eficaz que el paracetamol como analgésico pero más efectivo como antipirético 16,
- Otro meta-análisis concluye que en la población adulta y en niños, el ibuprofeno parece ser ligeramente más eficaz en su efecto antipirético y analgésico comparado con paracetamol 17,
El análisis de la eficacia de ibuprofeno ha ido más allá con estudios que lo comparan no solo con paracetamol sino con la asociación paracetamol codeína. En niños operados de amígdalas se observó una eficacia analgésica similar entre la combinación de paracetamol y codeína y el ibuprofeno pero mejor tolerancia de éste por menor incidencia estadísticamente significativa de náuseas 18,
En estudios para el control del dolor post-episiotomía se prefirió ibuprofeno a la combinación paracetamol-codeína-cafeína por ser más eficiente 19 y tener menor aparición de efectos adversos 19,20, En otro estudio en niños con fractura de brazo se observó que el ibuprofeno era, al menos, igual de efectivo que la combinación paracetamol-codeína y producía menor aparición de efectos adversos 21,
Se obtuvieron los mismos resultados en otro estudio para tratar el dolor post-operatorio en cirugía estética facial 22, En otras ocasiones, la ventaja del ibuprofeno sobre la combinación paracetamol-codeína no se basó en una menor incidencia de efectos adversos, sino en una mayor duración de la acción analgésica para controlar el dolor en el post-operatorio de pacientes que recibieron cirugía ortopédica 23,
- Eficacia y seguridad de la codeína La codeína posee un claro efecto analgésico debido a su condición de profármaco que se transforma en morfina a través de un proceso de desmetilación hepática.
- Debido a que este proceso es saturable, posee un techo analgésico y, por consiguiente, es considerado por ello un opiáceo menor.
Por lo tanto, la codeína, junto con tramadol (otro opiáceo menor que ha demostrado similar eficacia y tolerancia), son el referente opiáceo a asociar a los AINE en el segundo escalón de la escalera analgésica de la OMS 24, Es interesante observar que en estudios clínicos que comparan AINE + codeína con AINE solo, codeína sola y placebo, el tratamiento que está más cerca del placebo y que, por lo tanto, es más difícil de demostrar eficacia con respecto a él, es la codeína sola 25,
Aparte de su efecto analgésico, la codeína posee un efecto antitusígeno, como la mayoría de opioides. De hecho, probablemente la codeína sea el fármaco antitusígeno más utilizado. Dicho efecto antitusígeno se alcanza con dosis subanalgésicas (la dosis antitusígena en adultos es de 10-20 mg) 3, Entre sus efectos adversos más importantes se encuentra la sedación y los trastornos gastrointestinales (náuseas, estreñimiento).
Debe usarse con precaución en la población anciana (por mayor sensibilidad a la sedación con mayor riesgo de depresión respiratoria y por la retención urinaria), en los asmáticos y pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), así como en la insuficiencia respiratoria, insuficiencia cardiaca, renal, hepática o hipotiroidismo.
- En dosis elevadas en la embarazada puede producir una prolongación del parto y en el neonato un síndrome de abstinencia 3,
- Sus efectos adversos se ven aumentados por el consumo de alcohol y otros depresores centrales, así como por el uso de anticolinérgicos (que aumentan el estreñimiento y la retención urinaria) 3,
Por otro lado, el consumo de inductores o de inhibidores enzimáticos puede modificar la eficacia analgésica de la codeína, sobre todo en relación con la isoforma del citocromo P450 CYP2D6. Así, para un metabolizador lento del CYP2D6 (y el 7% de los caucásicos lo son) la codeína puede resultar ineficaz 26 y para los metabolizadores ultrarrápidos del CYP2D6, producir un aumento de sus efectos adversos 27,
Experiencia clínica con combinaciones analgésicas Para que la elección de una determinada combinación farmacológica analgésica sea adecuada hay que tener en cuenta los siguientes requisitos: por un lado, unir moléculas con mecanismos de acción analgésicos efectivos y diferentes, y por otro, que estos principios activos no compitan metabólicamente 2,
Con esta premisa, existen estudios que han evaluado la farmacocinética de la combinación ibuprofeno-codeína en diferentes dosis para llegar a la conclusión de que no existe interacción farmacocinética alguna entre estos 2 compuestos 28,29, Además, se sugiere que la similar vida media observada entre la codeína y el ibuprofeno podría ser una ventaja para la combinación analgésica de ambos principios activos 29,
- Antes de evaluar el sinergismo entre ibuprofeno y codeína, se pensó en demostrar el efecto aditivo de la codeína en el paracetamol.
- Existen estudios que demuestran que, aunque con diferencias pequeñas pero estadísticamente significativas, la eficacia del paracetamol más la codeína supera a la del paracetamol solo, aunque con el inconveniente de que los efectos adversos eran significativamente mayores con la combinación cuando se utilizaba a dosis múltiple, pues en la primera dosis la tolerancia era similar 30,
Existen estudios clínicos de otras combinaciones analgésicas de opiáceos parecidos a la codeína con ibuprofeno. Es el caso de la hidrocodona. En un estudio se compararon 15 mg de hidrocodona + 400 mg de ibuprofeno con los componentes por separado y con placebo en mujeres con moderado o grave dolor post-operatorio de cirugía abdominal o ginecológica.
La combinación fue significativamente superior al placebo y a los componentes por separado. Se habló en todo momento de efecto aditivo pero no de sinergia 31, Sin embargo, la sinergia entre ibuprofeno e hidrocodona fue medida y observada más tarde en modelos experimentales de nocicepción en ratones 32,
Los estudios clínicos con la combinación ibuprofeno y codeína comienzan a principios de los años ochenta ( tabla 2 ). Se evaluó la eficacia analgésica en sujetos que habían tenido una extracción del tercer molar con distintos tratamientos: codeína 60 mg, aspirina 650 mg, ibuprofeno 400 mg, aspirina 650 mg + codeína 60 mg, ibuprofeno 400 mg + codeína 60 mg o placebo.
La combinación de ibuprofeno y codeína fue el tratamiento más eficaz (aunque no estadísticamente significativo con respecto al ibuprofeno solo), incluso ibuprofeno solo fue superior a la aspirina sola y alcanzó una eficacia analgésica incluso mayor a la combinación de aspirina y codeína 28, Otro estudio comparó la eficacia analgésica después de una episiotomía de la combinación ibuprofeno-codeína, codeína sola y placebo, resultando más eficaz la combinación 33,
Otro estudio posterior dio a la combinación ibuprofeno 200 mg-codeína 30 mg como la más eficaz en comparación con aspirina 500 mg-codeína 30 mg y codeína sola de 30 mg en pacientes que tuvieron una extracción del tercer molar 34, En otro estudio se demostró que la combinación ibuprofeno-codeína producía una analgesia mayor estadísticamente significativa que la combinación paracetamol-codeína-cafeína, aunque las dosis de codeína eran distintas según los grupos (25,6 mg de codeína en la combinación con 400 mg de ibuprofeno versus 16 mg de codeína en la combinación con 1 g de paracetamol y 60 mg de cafeína).
La incidencia de efectos adversos fue similar en ambos grupos (en torno al 20%) 35, Un meta-análisis de finales de los años noventa evaluó la eficacia analgésica de ibuprofeno solo y en combinación con codeína o cafeína en el dolor posquirúrgico (la mayoría de ellos por extracción del tercer molar o dolor post-episiotomía).
Los resultados indicaron que la combinación ibuprofeno-codeína aportaba un mayor efecto analgésico que el ibuprofeno solo pero solamente a partir de unas determinadas dosis de codeína. Es decir, la codeína en dosis bajas (15 mg) no aportaba un plus analgésico (probablemente porque la codeína a estas dosis posee un efecto más antitusígeno que analgésico).
- Los resultados con cafeína son inciertos y probablemente no mejore la eficacia analgésica de ibuprofeno solo 36,
- Otro tema relacionado con la optimización de la combinación analgésica son las dosis.
- Para ello se han realizado estudios para clarificar cual dosis sería la óptima para la combinación ibuprofeno-codeína.
Con este respecto, a mediados de los años ochenta, un estudio doble ciego controlado con placebo comparó 3 dosis de combinaciones entre ibuprofeno y codeína y otro brazo de tratamiento con aspirina. Los pacientes diana fueron aquellos a los que se le había extraído el tercer molar.
- La combinación ibuprofeno-codeína superó en eficacia a la aspirina y el placebo y la dosis más óptima en términos de minimización de aparición de efectos adversos fue ibuprofeno 400 mg/codeína 30 mg 37,
- Un año más tarde, un estudio comparó la eficacia analgésica de dosis única de los siguientes tratamientos para mujeres que habían sufrido una episiotomía, cesárea o cirugía ginecológica: Una combinación ibuprofeno 400 mg + codeína 60 mg, ibuprofeno 200 mg + 30 mg de codeína, ibuprofeno 400 mg solo, codeína 60 mg sola o placebo.
El resultado fue que la dosis más eficaz correspondió a la combinación ibuprofeno 400 mg + codeína 60 mg. Además, se observó que la adición de codeína confería mayor duración analgésica al ibuprofeno 25, Hipótesis de sinergismo ibuprofeno-codeína Parece ser que los mecanismos moleculares que pueden explicar el sinergismo entre opioides y antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son varios.
Un primer mecanismo a nivel periférico ha sido demostrado experimentalmente en neuronas del trigémino y del ganglio nodoso ( fig.1 ). En estas neuronas aferentes, las prostaglandinas formadas por la vía de la ciclooxigenasa (particularmente PGE 2 y PGI 2 ) actúan sobre sus receptores prostanoides para estimular la vía de la adenilciclasa a través de proteínas G estimuladoras.
La adenilciclasa cataliza la conversión del ATP en AMP cíclico (AMPc). Este AMPc formado se encarga de modular las corrientes catiónicas activadas por hiperpolarización (I h ), aumentando la excitabilidad y la frecuencia del potencial de acción del nervio.
Por lo tanto, los AINE, al inhibir la producción de prostaglandinas, estarían inhibiendo de forma indirecta la activación de la adenilciclasa para formar AMPc y por tanto disminuyendo la excitabilidad del nervio sensitivo. Por otro lado, los opioides actúan sobre los receptores μ que funcionalmente antagonizan la vía de la adenilciclasa a través de proteínas G inhibitorias, disminuyendo su actividad y producción de AMPc, por lo que también disminuirían la excitabilidad de las neuronas aferentes.
Un segundo mecanismo de sinergia podría explicarse a nivel central ( fig.2 ). Una región clave en la acción analgésica farmacológica en el sistema nervioso central es la llamada sustancia gris periacueductal mesencefálica (PAG). Esta región es rica en receptores opioides y posee una moderada densidad de receptores prostanoides.
Esto sugiere que los AINE pueden producir analgesia y sinergia con opioides también por un mecanismo central. En principio se podría asumir y explicar este hecho en base a un mecanismo dependiente de prostaglandinas similar al mecanismo periférico descrito anteriormente. Sin embargo, se ha podido comprobar que la naloxona, antagonista opioide, es capaz de atenuar la analgesia producida por los AINE a nivel de la PAG, sugiriendo que estos producen analgesia en parte por un mecanismo endógeno opioide independiente de las prostaglandinas.
Se ha propuesto que el efecto analgésico de los opioides en la PAG está relacionado con la supresión de la influencia inhibitoria del neurotransmisor GABA (ácido gamma-aminobutírico) 38, El mecanismo responsable de esta acción supresora de los receptores μ opioides sobre la respuesta gabaérgica de las células nerviosas se relaciona con la inhibición de los canales de calcio y la apertura de la conductancia del potasio presináptico, ambos dependientes del voltaje.
Todas estas acciones están mediadas de forma completa y directa por proteínas G inhibitorias y son independientes de la adenilciclasa. Los opioides a nivel de la PAG estimulan a la enzima fosfolipasa A 2, Esto da lugar a un aumento en la formación de 12-lipooxigenasa, 5-lipooxigenasa y ciclooxigenasa a través del ácido araquidónico.
Los metabolitos de la 12-lipooxigenasa potencian la actividad dependiente del voltaje de los canales de potasio (K v ) que inhiben la respuesta neurotransmisora gabaérgica. Los AINE y los inhibidores de la 5-lipooxigenasa bloquean las vías alternativas de la fosfolipasa A 2, por lo que a partir del ácido araquidónico se formaría más 12-lipooxigenasa, lo que potenciaría el efecto inhibidor del neurotransmisor GABA a través de la mayor activación de la conductancia de los canales de potasio K v, favoreciendo, por tanto, la eficacia de los opioides.
Este mecanismo es el que podría también explicar el sinergismo de los AINE sobre los opioides a nivel central, independientemente de la formación de prostaglandinas. Además, puede ser una hipótesis explicativa de la capacidad de la naloxona para disminuir la acción analgésica central de los AINE. No todos los AINE poseen la misma capacidad analgésica central.
Aunque tanto la ciclooxigenasa-1 (COX-1) como la ciclooxigenasa-2 (COX-2) están expresadas en el cerebro, parece ser que la COX-1 tiene una mayor importancia en el rol analgésico de los AINE a nivel central, y por lo tanto, en el sinergismo con los opioides.
Todavía no se sabe la veracidad de este mecanismo de inhibición presináptica mediado por la 12-lipooxigenasa en humanos ya que solamente se ha experimentado en neuronas de invertebrados. Lo que sí se cree es que dicho mecanismo no es exclusivo de la PAG, sino que en otras regiones del SNC donde los AINE producen analgesia el mecanismo debe ser similar, por ejemplo, en la espina dorsal de la médula espinal, ya que se ha demostrado que en esta zona la naloxona ha revertido los efectos analgésicos de los AINE.
Aunque, en parte, en esta región también puede explicarse la analgesia por la vía dependiente de la síntesis de prostaglandinas. Es más, la densidad de receptores prostanoides es más alta en esta zona que en la región PAG. Una vez expuestas estas hipótesis de mecanismos de acción, sería interesante en el futuro examinar la analgesia y el sinergismo que podrían realizar los inhibidores de la 5-lipooxigenasa (5-LOXI) 39,40,
- Conclusiones La combinación ibuprofeno-codeína aporta 2 mecanismos diferentes (antiinflamatorio no esteroideo y opioide) habiéndose demostrado que no interaccionan entre ellos.
- Esto es una ventaja con respecto a combinaciones analgésicas como paracetamol-codeína ya que esta última no presenta propiedades antiinflamatorias.
Por otro lado, ibuprofeno es de los mejores AINE en cuanto a cociente de eficacia y seguridad y la codeína posee una mejor tolerancia que los opiáceos mayores. Además, se han señalado diversas hipótesis de sinergismo farmacológico entre estas 2 sustancias: una de ellas, a través de un mecanismo del sistema nervioso periférico, relacionado con la inhibición de las prostaglandinas vía adenilciclasa para la formación de AMP cíclico.
Otra hipótesis, del SNC, independiente del bloqueo de la síntesis de prostaglandinas y de la vía de la adenilciclasa, activando a la fosfolipasa A2 e inhibiendo el impulso nervioso a través de la conductancia de canales de potasio mediados por metabolitos de la 12-lipooxigenasa. Conflicto de intereses Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
Agradecimiento Agradecimientos a Laboratorios Abbott. Bibliografía R.B. Raffa. Pharmacology of oral combination analgesics: rational therapy for pain. J Clin Pharm Ther, 26 (2001), pp.257-264 J.R. Gonzalez-Escalada. La sinergia farmacológica aplicada a la analgesia: revisión de la combinación de ibuprofeno con codeína.
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¿Qué Cox inhibe el ibuprofeno?
Anti-inflamatórios não esteroides: Efeitos cardiovasculares, cérebro-vasculares e renais • • Os anti-inflamatórios não esteroides (AINEs) encontram-se entre os medicamentos mais prescritos em todo o mundo. Essa classe heterogênea de fármacos inclui a aspirina e vários outros agentes inibidores da ciclo-oxigenase (COX), seletivos ou não.
Os AINEs não seletivos são os mais antigos, e designados como tradicionais ou convencionais. Os AINEs seletivos para a COX-2 são designados COXIBEs. Nos últimos anos, tem sido questionada a segurança do uso dos AINEs na prática clínica, particularmente dos inibidores seletivos da COX-2. As evidências sobre o aumento do risco cardiovascular com o uso de AINEs são ainda incompletos, pela ausência de ensaios randomizados e controlados com poder para avaliar desfechos cardiovasculares relevantes.
Entretanto, os resultados de estudos clínicos prospectivos e de meta-análises indicam que os inibidores seletivos da COX-2 exercem importantes efeitos cardiovasculares adversos, que incluem aumento do risco de infarto do miocárdio, acidente vascular cerebral, insuficiência cardíaca, insuficiência renal e hipertensão arterial.
O risco desses efeitos adversos é maior em pacientes com história prévia de doença cardiovascular ou com alto risco para desenvolvê-la. Nesses pacientes, o uso de inibidores da COX-2 deve ser limitado àqueles para os quais não há alternativa apropriada e, mesmo assim, somente em doses baixas e pelo menor tempo necessário.
Embora os efeitos adversos mais frequentes tenham sido relacionados à inibição seletiva da COX-2, a ausência de seletividade para essa isoenzima não elimina completamente o risco de eventos cardiovasculares, de modo que todos os fármacos do largo espectro dos AINEs somente devem ser prescritos após consideração do balanço risco/benefício.
- Anti-inflamatórios não esteroides; risco; efeitos fisiológicos de drogas; efeitos fisiológicos de drogas; efeitos fisiológicos de drogas Los antiinflamatorios no esteroides (AINEs) se encuentran entre los medicamentos más prescriptos en todo el mundo.
- Esta clase heterogénea de fármacos incluye la aspirina y varios otros agentes inhibidores de la ciclo-oxigenase (COX), selectivos o no.
Los AINEs no selectivos son los más antiguos, y designados como tradicionales o convencionales. Los AINEs selectivos para la COX-2 se designan COXIBEs. En los últimos años, ha sido cuestionada la seguridad del uso de los AINEs en la práctica clínica, particularmente de los inhibidores selectivos de la COX-2.
- Las evidencias sobre el aumento del riesgo cardiovascular con el uso de AINEs son todavía incompletas, debido a la ausencia de ensayos randomizados y controlados con poder para evaluar desenlaces cardiovasculares relevantes.
- Sin embargo, los resultados de estudios clínicos prospectivos y de metaanálisis indican que los inhibidores selectivos de la COX-2 ejercen importantes efectos cardiovasculares adversos, que incluyen aumento del riesgo de infarto del miocardio, accidente cerebrovascular, insuficiencia cardiaca, insuficiencia renal y hipertensión arterial.
El riesgo de estos efectos adversos es mayor en pacientes con historia previa de enfermedad cardiovascular o con alto riesgo para desarrollarla. En estos pacientes, el uso de inhibidores de la COX-2 debe ser limitado a aquellos para los que no hay alternativa apropiada y, aun así, solamente en dosis bajas y por el menor tiempo necesario.
Aunque los efectos adversos más frecuentes se relacionen a la inhibición selectiva de la COX-2, la ausencia de selectividad para esta isoenzima no elimina completamente el riesgo de eventos cardiovasculares, de modo que todos los fármacos del largo espectro de los AINEs se deben prescribir solamente tras consideración del balance riesgo/beneficio.
Antiinflamatorios no esteroides; riesgo; efectos fisiológicos de drogas; efectos fisiológicos de drogas; efectos fisiológicos de drogas The nonsteroidal anti-inflammatory drugs (NSAIDs) are among the most often prescribed drugs in the world. This heterogeneous class of drugs includes aspirin and several other selective or non-selective cyclooxygenase (COX) inhibitors.
- The non-selective NSAIDs are the oldest ones and are called traditional or conventional NSAIDs.
- The selective NSAIDs are called COX-2 inhibitors.
- In recent years, the safety of NSAID use in clinical practice has been questioned, especially that of the selective COX-2 inhibitors.
- The evidence on the increase in cardiovascular risk with the use of NSAIDs is still scarce, due to the lack of randomized and controlled studies with the capacity of evaluating relevant cardiovascular outcomes.
However, the results of prospective clinical trials and meta-analyses indicate that the selective COX-2 inhibitors present important adverse cardiovascular effects, which include increased risk of myocardial infarction, cerebrovascular accident, heart failure, kidney failure and arterial hypertension.
The risk of these adverse effects is higher among patients with a previous history of cardiovascular disease or those at high risk to develop it. In these patients, the use of COX-2 inhibitors must be limited to those for which there is no appropriate alternative and, even in these cases, only at low doses and for as little time as possible.
Although the most frequent adverse effects have been related to the selective COX-2 inhibition, the absence of selectiveness for this isoenzyme does not completely eliminate the risk of cardiovascular events; therefore, all drugs belonging to the large spectrum of NSAIDs should only be prescribed after consideration of the risk/benefit balance.
- ARTÍCULO DE REVISIÓN
- Instituto Dante Pazzanese de Cardiologia, São Paulo, SP – Brasil
- Correspondencia
- RESUMEN
Los antiinflamatorios no esteroides (AINEs) se encuentran entre los medicamentos más prescriptos en todo el mundo. Esta clase heterogénea de fármacos incluye la aspirina y varios otros agentes inhibidores de la ciclo-oxigenase (COX), selectivos o no. Los AINEs no selectivos son los más antiguos, y designados como tradicionales o convencionales. Los AINEs selectivos para la COX-2 se designan COXIBEs. En los últimos años, ha sido cuestionada la seguridad del uso de los AINEs en la práctica clínica, particularmente de los inhibidores selectivos de la COX-2. Las evidencias sobre el aumento del riesgo cardiovascular con el uso de AINEs son todavía incompletas, debido a la ausencia de ensayos randomizados y controlados con poder para evaluar desenlaces cardiovasculares relevantes. Sin embargo, los resultados de estudios clínicos prospectivos y de metaanálisis indican que los inhibidores selectivos de la COX-2 ejercen importantes efectos cardiovasculares adversos, que incluyen aumento del riesgo de infarto del miocardio, accidente cerebrovascular, insuficiencia cardiaca, insuficiencia renal y hipertensión arterial. El riesgo de estos efectos adversos es mayor en pacientes con historia previa de enfermedad cardiovascular o con alto riesgo para desarrollarla. En estos pacientes, el uso de inhibidores de la COX-2 debe ser limitado a aquellos para los que no hay alternativa apropiada y, aun así, solamente en dosis bajas y por el menor tiempo necesario. Aunque los efectos adversos más frecuentes se relacionen a la inhibición selectiva de la COX-2, la ausencia de selectividad para esta isoenzima no elimina completamente el riesgo de eventos cardiovasculares, de modo que todos los fármacos del largo espectro de los AINEs se deben prescribir solamente tras consideración del balance riesgo/beneficio. Palabras clave: Antiinflamatorios no esteroides/efectos adversos, riesgo, efectos fisiológicos de drogas/corazón/riñón/cerebro. Introducción Los antiinflamatorios no esteroides (AINEs) se encuentran entre los medicamentos más prescriptos en todo el mundo. Se utilizan principalmente en el tratamiento de la inflamación, dolor y edema, así como también en las osteoartritis, artritis reumatoides y disturbios musculoesqueléticos. Esta clase heterogénea de fármacos incluye la aspirina y variados otros agentes inhibidores de la ciclooxigenasa (COX), selectivos o no (). La aspirina es el AINE más antiguo y ampliamente estudiado, sin embargo se lo considera separadamente de los demás, por su uso predominante en el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares, en dosis bajas 1, Los AINEs no selectivos son los más antiguos, designados tradicionales o convencionales. Los AINEs selectivos para la COX-2 se designan COXIBEs 2, En los últimos años, ha sido cuestionada la seguridad del uso de los AINEs en la práctica clínica, particularmente de los inhibidores selectivos de la COX-2 en la presencia de determinadas condiciones y enfermedades, lo que conllevó la retirada de algunos de estos fármacos del mercado. Los AINEs tradicionales pueden presentar estándar de selectividad COX-2 similar al de los COXIBEs, como es el caso del diclofenaco comparado con el celecoxib, o ser inhibidores más activos de la COX-1, como naproxeno e ibuprofeno. Fisiopatología La activación de la enzima fosfolipasa A 2, en respuesta a varios estímulos, hidroliza los fosfolípidos de la membrana, liberando ácido araquidónico en el citoplasma. Este, a su vez, sirve de sustrato para dos vías enzímicas: ciclo-oxigenase y lipo-oxigenase. Por la vía de la COX se genera la prostaglandina (PG) H 2, que estimula la formación de variados prostanoides, incluidas diversas prostaglandinas – PGI 2, PGD 2, PGE 2 PGF 2 α -, y tromboxano A 2, Por la vía de la lipo-oxigenasa se forman leucotrienos, lipoxinas y otros productos. En 1991, se evidenció la existencia de dos isoformas de la enzima ciclo-oxigenase, designadas COX-1 y COX-2, codificadas por diferentes genes, con estructuras químicas similares, el 60% de homología en la secuencia de aminoácidos y estándares singulares de expresión 1-3, La isoforma COX-1 se expresa de forma constitutiva (constante) en la mayor parte de los tejidos; mientras la COX-2 es inducida en las inflamaciones. La COX-1 es esencial para el mantenimiento del estado fisiológico normal de muchos tejidos, incluidos la protección de la mucosa gastrointestinal; control del flujo sanguíneo renal; homeostasia; respuestas autoinmunes; funciones pulmonares y del sistema nervioso central; cardiovasculares y reproductivas 3-5, La COX-2, inducida en la inflamación por varios estímulos – como citocinas, endotoxinas y factores de crecimiento -, origina prostaglandinas inductoras, que contribuyen al desarrollo del edema, rubor, fiebre e hiperalgesia. La COX-2 se expresa también en las células vasculares endoteliales normales, que secretan prostaciclina en respuesta al estrés de cizallamiento. El bloqueo de la COX-2 resulta en inhibición de la síntesis de prostaciclina 6-8, Las enzimas COX desempeñan un importante rol en la homeostasia cardiovascular. Las plaquetas contienen solamente la COX-1. El tromboxano A2 (TXA 2 ), sintetizado primariamente en las plaquetas por la actividad de la COX-1, ocasiona agregación plaquetaria, vasoconstricción y proliferación de células musculares lisas. De otra parte, la síntesis de prostaciclina, ampliamente mediada por la actividad de la COX-2 en las células endoteliales macrovasculares, se contrapone a estos efectos. La prostaciclina es el principal prostanoide secretado por las células endoteliales. Provoca relajación de las células musculares lisas vasculares y es un potente vasodilatador. Además de esto, por actuar en los receptores IP de las plaquetas, ejerce importante actividad antiplaquetaria 9, Diversos prostanoides, especialmente la prostaciclina y la PGE 2, son fundamentales para proteger la mucosa gástrica de los efectos corrosivos del ácido estomacal, así como para mantener la condición naturalmente sana de la mucosa gástrica. Estas prostaglandinas son producidas por acción de la COX-1 9 (). Las consecuencias del bloqueo de la COX-1 en el trato gastrointestinal son la inhibición de la protección de su mucosa y el aumento de la secreción ácida, pudiendo llevar a la erosión, ulceración, perforación y hemorragia. La probabilidad de ocurrencia de úlcera o sangrado aumenta con el uso en dosis altas o prolongada del AINE, administración concomitante de corticoesteroides y/o anticoagulantes, tabaquismo, bebidas alcohólicas y edad avanzada. De otra parte, la inhibición selectiva de la COX-2 puede inducir a la reducción relativa de la producción endotelial de prostaciclina, mientras que la producción plaquetaria de TXA 2 no es alterada. Este desequilibrio de los prostanoides hemostáticos puede aumentar el riesgo de trombosis y de eventos vasculares. Se demostró, también, en ratones no anestesiados, que la COX-2 media efectos cardioprotectores durante la fase tardía del preacondicionamiento miocárdico 10, Con todo, la administración de inhibidores de la COX-2 a los animales, 24h tras el preacondicionamiento isquémico, elimina este efecto cardioprotector sobre el miocardio “aturdido” y el infarto del miocardio. Estudios subsiguientes indicaron que la regulación superior de la COX-2 desempeña rol-clave en la cardioprotección mediada por las PGE 2 y PGI 2 10-12, Farmacología Las diferencias en los efectos biológicos de los inhibidores de la COX resultan del grado de selectividad para las dos isoenzimas, de las variaciones tisulares específicas en su distribución y de las enzimas que convierten la PGH 2 en prostanoides específicos. Los AINEs no selectivos de la COX inhiben la producción de prostaglandinas en la mucosa gastrointestinal, pudiendo causar gastroduodenitis, úlcera gástrica y sangrado digestivo. Estos AINEs, como la aspirina, reducen la producción plaquetaria de TXA 2, debido al bloqueo de la COX-1, y previenen la trombosis arterial (). Recientemente, ha sido postulado que los inhibidores selectivos de la COX-2 aumentan el riesgo cardiovascular. Estos agentes no bloquean la formación de TXA 2, ni ejercen acción antiplaquetaria, debido a la inhibición mínima de la COX-1, pero reducen la producción de prostaciclina 12, El aumento del riesgo cardiovascular podría resultar de la no oposición a las acciones de la TXA 2 y de la propensión a trombosis. Además de ello, variados modelos experimentales vienen evidenciando el efecto cardioprotector de la COX-2, que pudiera ser bloqueado por los inhibidores de esta isoforma. La COX-2 se expresa en niveles bajos por las células endoteliales en condiciones estáticas, pero se la induce por medio del estrés de cizallamiento 8, Estos hallazgos sugieren que la reducción de la producción de prostaciclina, secundaria al descenso de la COX-2, puede aumentar el riesgo de aterogénesis focal en locales de bifurcación vascular. A partir de la década de 1960, muchos AINEs no selectivos se introdujeron en la práctica clínica. Estos AINEs, tradicionales o convencionales, presentan efectos inhibitorios variados con relación a la COX-1 y COX-2, así como a los efectos colaterales en el tubo digestivo. La aspirina es aproximadamente 166 veces más potente como inhibidor de la COX-1 en relación a la COX-2 13, La aspirina acetila e inhibe irreversiblemente la isoenzima COX-1, lo que conlleva la inhibición plaquetaria completa, por el tiempo de vida de las plaquetas 14, Otros AINEs no selectivos, como naproxeno, ibuprofeno y piroxicam, ocasionan inhibición variable de la COX-1 y COX-2 y provocan inhibición plaquetaria reversible. Efectos cardiovasculares Debido a la relativa escasez de la expresión de la COX-2 en el trato gastrointestinal y su gran expresión en los tejidos inflamatorios y/o doloridos, se desarrollaron e se introdujeron en la terapéutica, a partir de 1999, los inhibidores selectivos de la COX-2, designados COXIBEs, con el objetivo de minimizar la toxicidad gastrointestinal de los AINEs no selectivos 15, Los COXIBEs son tan o más eficaces que los AINEs no selectivos para el tratamiento de la inflamación y síntomas asociados. Sin embargo, como las plaquetas expresan primariamente la COX-1, estos fármacos no tienen propiedades antitrombóticas. Con base en experimentos animales, observación de registros y ensayos clínicos, se propuso que las más importantes consecuencias de la inhibición selectiva de la COX-2 con relación al corazón son la propensión a la trombosis, por la desviación del balance protrombótico/antitrombótico en la superficie endotelial, además de la pérdida del efecto protector de la regulación superior de la COX-2 en la isquemia miocárdica y en el infarto del miocardio 15-17 (). Efectos renales Prostaglandinas homeostáticas – prostaciclina, PGE 2 y PGD 2 -, generadas por acción de la COX-1 en distintas regiones de los riñones, dilatan la vasculatura, disminuyen la resistencia vascular renal y aumentan la perfusión del órgano. Esto lleva a la redistribución del flujo sanguíneo de la corteza renal para los nefronas en la región intramedular 18,19, La inhibición de estos mecanismos tiende a disminuir la perfusión renal total y redistribuir el flujo sanguíneo para la corteza, proceso que culmina en vasoconstricción renal aguda, isquemia medular y, en ciertas condiciones, insuficiencia renal aguda. Además de ello, PGE 2 y PGF 2 α medían efectos diuréticos y natriuréticos, mientras que PGE 2 y PGI 2 antagonizan la acción de la vasopresina. Ambas, generadas en los glomérulos, contribuyen a mantener la tasa de filtración glomerular. Estas prostaglandinas constituyen un mecanismo autoregulador ante la presencia de la disminución de la perfusión renal, como en la insuficiencia cardiaca y en condiciones de hipovolemia. Las respuestas a la disminución del flujo sanguíneo renal y a las alteraciones hemodinámicas renales incluyen la estimulación del sistema renina-angiotensina-aldosterona, que resulta en vasoconstricción y retención de sodio y agua, y en la estimulación del sistema nervioso simpático, que aumenta adicionalmente el tono vascular. En estas situaciones, las prostaglandinas promueven dilatación compensatoria de la vasculatura renal para asegurar un flujo sanguíneo normal y prevenir el deterioro funcional agudo del riñón. Además de esto, estas prostaglandinas reducen la liberación de noradrenalina, lo que también favorece la vasodilatación. Es debido, en gran parte, a la atenuación de estos mecanismos contraregulatorios mediados por las prostaglandinas que los AINEs comprometen la función renal, especialmente en pacientes de alto riesgo, que ya presentan reducción de la perfusión renal (). Retención de sodio y agua y edema son efectos colaterales de los AINEs, sin embargo, son habitualmente leves y subclínicos 18,20, La prevalencia de edema sintomático es del 3% al 5% 21, Otra reacción potencialmente adversa inducida por los AINEs es la hipercalemia. Los AINEs atenúan la liberación de renina mediada por las prostaglandinas, reducen la formación de aldosterona y, en consecuencia, disminuyen la excreción de potasio. Además de ello, ante el flujo glomerular reducido, la oposición a los efectos natriuréticos y diuréticos de las prostaglandinas por los AINEs puede aumentar la reabsorción de sodio y agua en el túbulo renal, con reducción del reemplazo Na+-K+ en el nefron distal 22, Los pacientes más susceptibles a desarrollar hipercalemia son los que utilizan simultáneamente suplemento de potasio, diuréticos ahorradores de potasio y/o inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (ECA), además de aquellos que tienen disfunción renal basal, insuficiencia cardiaca o diabetes melito 21, Las complicaciones renales inducidas por los AINEs son reversibles con la supresión de estos fármacos. Sin embargo, en presencia de condiciones adversas asociadas, pueden, aunque raramente, provocar disfunción renal aguda, síndrome nefrótico, nefritis intersticial o necrosis papilar renal. El uso prolongado de AINEs puede provocar elevación de 5 a 6 mm Hg de la presión arterial promedio, principalmente en hipertensos, e interferir con los efectos antiipertensivos de diuréticos, betabloqueantes e inhibidores de la ECA. Sin embargo, hay gran variación de los resultados entre los fármacos y entre los estudios clínicos. Estudios clínicos Algunos estudios experimentales y clínicos sugirieron una probable relación entre inhibidores de la COX-2 y el aumento del riesgo cardiovascular. Hasta el presente momento, ningún ensayo prospectivo completo ha evaluado este problema. Sin embargo, estudios clínicos planificados para evaluar desenlaces gastrointestinales relataron eventos cardiovasculares. Los resultados de estos estudios clínicos, que utilizaron diferentes inhibidores de la COX-2, fueron inconsistentes y es probable que el estado de riesgo basal del paciente desempeñe un importante rol. Efectos cardiovasculares Los primeros estudios evaluaron el rofecoxib, que ya fue retirado del mercado. El Vioxx Gastroinstestinal Outcomes Research Study (VIGOR) 2 3 comparó el rofecoxib, 50mg/día, con el naproxeno, 500mg dos veces al día, en 8.076 pacientes con artritis reumatoide. Se excluyó a pacientes con eventos cardiovasculares recientes o en uso de aspirina. El desenlace primario fue evento gastrointestinal alto. Aunque no fue objetivo del estudio, se observó mayor incidencia de infarto del miocardio con rofecoxib (0,4%/año), comparado con naproxeno (0,1%/año). El sangrado gastrointestinal fue significantemente menor con rofecoxib, comparado con naproxeno (RR (riesgo relativo) 0,4). El naproxeno es un inhibidor fuerte de la COX-1 e inhibe en el 71% al COX-2, mientras que el diclofenaco inhibe esta isoenzima en el 94% 24, El Multinational Etoricoxib and Diclofenac Arthritis Long-Term MEDAL Study Program 25 comparó el agente altamente selectivo para inhibición de la COX-2 (etericoxib) con un AINE tradicional, el diclofenaco, relativamente menos selectivo para inhibición de la COX-2. Este estudio no reveló inferioridad del etoricoxib comparado con diclofenaco, con relación a los eventos cardiovasculares trombóticos. Aunque en el estudio VIGOR 23 se relató un aumento en la tasa de infarto de miocardio entre los pacientes asignados para rofecoxib, en comparación con naproxeno (4 vs 1; p<0,001), esta diferencia puede haber ocurrido en parte debido al efecto inhibidor de la agregación plaquetaria del naproxeno en el esquema posológico utilizado. Sin embargo, los resultados del APPROVE - The Adenomatous Polyp Prevention on VIOXX 24 -, el primer gran estudio que comparó un inhibidor selectivo de la COX-2 con placebo, mostraron aumento de dos veces en los eventos vasculares con el rofecoxib. Tras el estudio APC 5, que comparó celecoxib con placebo, relató incidencia similar de eventos vasculares con este AINE selectivo 26, Sin embargo, en el Celecoxib Long-Term Arthrites Safety Study (CLASS) 27, que incluyó a 8.059 pacientes con osteoartritis o artritis reumatoide, tratados con celecoxib, 400 mg dos veces del día, o con otro inhibidor no selectivo de la COX (ibuprofeno 800 mg, tres veces al día, o diclofenaco, 75 mg dos veces al día), no hubo diferencia estadísticamente significativa en la incidencia de eventos cardiovasculares entre los grupos. Las tasas de sangrado fueron mayores con ibuprofeno y diclofenaco (6,0%) en comparación con celecoxib (3,1%). Se debe señalar que diclofenaco e ibuprofeno ejercen actividad antiplaquetaria relativamente débil. En 2006, Kearney et al 28 publicaron los resultados de metaanálisis de 138 estudios randomizados implicando AINEs tradicionales e inhibidores selectivos de la COX-2, comparándolos con placebo y entre ellos. El desenlace primario fue evento vascular severo, definido como infarto de miocardio, accidente cerebrovascular o muerte vascular. Globalmente, en 121 estudios controlados con placebo, se produjeron 216 eventos vasculares en 18.190 pacientes/año tratados con inhibidor selectivo de la COX-2 (1,2%/año), comparados con 112 estudios en 12.639 pacientes/año en el grupo placebo (0,9%/año), correspondiendo a aumento relativo del 42% en la incidencia de un primer evento vascular severo ( rate ratio 1,42, p = 0,003), sin heterogeneidad significante entre los diferentes inhibidores selectivos de la COX-2. Este resultado fue principalmente atribuible al aumento del riesgo de infarto del miocardio (0,6%/año vs 0,33%/año; rate ratio 1,86; p = 0,0003), con pequeña diferencia en los otros desenlaces vasculares. Cerca de dos tercios de los eventos vasculares se produjeron entre los nueve estudios de largo plazo (un año o más de tratamiento esquematizado, promedio de 139 semanas). En estos estudios, el uso de inhibidor selectivo de la COX-2 se asoció al aumento del 45% en la incidencia de eventos vasculares ( rate ratio 1,45; p = 0,005), sin heterogeneidad significante entre el rate ratio de eventos. En el total, la incidencia de eventos vasculares severos fue similar entre un inhibidor selectivo de la COX-2 y cualquier AINE tradicional (1,0%/año vs 0,9%/año). Sin embargo, se observó acentuada heterogeneidad entre los estudios que compararon un inhibidor selectivo de la COX-2 con naproxeno: eventos vasculares ( rate ratio 1,57; p = 0,0006); infarto del miocardio (p = 0,04); accidente cerebrovascular (ACV) (p = 0,06); muerte vascular (p = 0,02). El resumen del rate ratio de eventos vasculares, en comparación con placebo, fue 0,92 para naproxeno, 1,51 para ibuprofeno y 1,63 para diclofenaco. En conclusión, los inhibidores selectivos de la COX-2 se asociaron al aumento moderado del riesgo de eventos vasculares; el mismo se produjo con los AINEs no selectivos ibuprofeno y diclofenaco en altas dosis, pero no con naproxeno. Respecto a asociación de un AINE con aspirina, las evidencias indican que el ibuprofeno, pero no el acetominofeno, diclofenaco o rofecoxib, interfiere con la capacidad de la aspirina de acetilación irreversible de la enzima COX-1 plaquetaria. Esto podría reducir el efecto protector de la aspirina contra os eventos aterotrombóticos. Recientemente, Garcia Rodriguez et al 29 han evaluado la asociación entre la frecuencia, dosis y duración del uso de diferentes AINEs y el riesgo de infarto del miocardio en la población general, en estudio de cohorte retrospectivo. Verificaron también si el grado de inhibición de la COX-2 en la sangre total puede ser un predictor bioquímico "sustituto" para el riesgo de infarto de miocardio asociado a los AINEs. Se identificó 8.852 casos de infarto no fatal en pacientes con 50 a 80 años, entre 2000 y 2005, y se llevó a cabo el análisis de casos-control. Se correlacionó el riesgo de infarto con el grado de inhibición de la COX-1 plaquetaria y de la COX-2 monocítica in vitro por la concentración terapéutica promedio de cada AINE. El riesgo de infarto del miocardio aumentó con el uso habitual de AINEs (RR 1,35; intervalo de confianza - IC 1,23 a 1,48) y este riesgo se correlacionó con la posología y la duración del tratamiento. El grupo de AINEs con grado de inhibición de la COX-2 menor que el 90% - ibuprofeno, meloxican, celicoxib y etoricoxib -, presentó RR de 1,18 (IC 1,02 a 1,28) mientras que el grupo de AINEs con inhibición mayor de la COX-2 - rofecoxib, indometacina, diclofenaco y piroxicam -, presentó RR 1,60 (IC 1,41 a 1,81; p < 0,01 para interacción). El grado de inhibición de la actividad de la COX-1 y COX-2 en la sangre total, in vitro, inducido por los AINEs individualmente, reveló que, con excepción del naproxeno e ibuprofeno, todos los otros inhibieron la COX-2 más intensamente que la COX-1, en concentraciones terapéuticas. Concluyeron los autores que la magnitud de la inhibición de la prostaciclina dependiente de la COX-2 puede representar el factor principal para el riesgo aumentado de infarto del miocardio entre los AINEs, con supresión no funcional de la COX-1. Esta propiedad es compartida por la mayoría de los AINEs tradicionales y COXIBEs, y la determinación de la concentración de la COX-2 en la sangre total puede representar un desenlace sustituto para predecir el riesgo cardiovascular de estos fármacos. La separación de los AINEs en inhibidores selectivos o no de la COX-2 representa sólo parcialmente la predicción del riesgo cardiovascular de los AINEs. Esos resultados son consistentes con los de estudios casos-control y ensayos clínicos randomizados 28,30, no obstante, sólo parcialmente con la visión actual de que la selectividad para la COX-2 es un atributo necesario para el riesgo cardiovascular. En verdad, se evidenció que la acción prolongada y dosis altas del compuesto activo se asocian con el riesgo aumentado para cualquier AINE. Estos hallazgos sugieren que el grado de inhibición de la COX por niveles terapéuticos de AINEs se debe considerar como el mayor determinante del riesgo cardiovascular 5,31,32, Teniendo en cuenta que la vasculatura y la COX-2 son las fuentes y los catalizadores más importantes de la PGI 2 5, los autores infirieron que solamente la reducción profunda de la actividad de la COX-2 (> 95%) resulta en una reducción sustancial de la síntesis de la PGI 2 in vivo, y, eventualmente, al aumento del riesgo de infarto del miocardio 29, Por tanto, el aumento del riesgo cardiovascular parece estar nítidamente relacionado a la efectiva inhibición de la COX-2, a menos que atenuada por la inhibición efectiva concomitante de la COX-1 plaquetaria. Hipertensión arterial Dos grandes metaanálisis 33,34, englobando más de 90 ensayos clínicos, demostraron que los AINEs pueden elevar la presión arterial. En ambos, la elevación se produjo en mayor magnitud en los pacientes hipertensos. En el análisis de Pope et al 33, indometacina y naproxeno elevaron la presión arterial promedio en 3,59 mmHg y 3,74 mmHg, respectivamente. El piroxican ejerció aumento insignificante (0,49 mmHg) de la presión arterial promedio. El aumento de la presión arterial provocado por los AINEs se asoció al descenso significante de las concentraciones de prostaglandinas y renina. En el metaanálisis de Jonhson et al 34, los datos mostraron que los AINEs aumentaron la presión arterial supina promedio en cerca de 5,0 mmHg. El piroxican indujo el aumento más elevado (6,2 mmHg). Aspirina, sulindac y flubiprofeno presentaron la menor elevación de la presión arterial; indometacina e ibuprofeno ejercieron efectos intermediarios. El conjunto de datos también mostró que los AINEs interfieren con los efectos antiipertensivos de las diversas clases de estos agentes, especialmente de aquellas cuyo mecanismo de acción involucra también la síntesis de las prostaglandinas vasodilatadoras, como diuréticos, inhibidores de la enzima de conversión de la angiotensina y betabloqueantes. Bloqueantes de los canales de calcio y antagonistas de los receptores de angiotensina II sufrieron menor interferencia de los AINEs en sus efectos 18,35, Eventos cerebrovasculares En los ensayos clínicos, el uso de los AINEs inhibidores selectivos de la COX-2 se asoció al riesgo aumentado de eventos cardiovasculares y muerte 36, La mayoría de los análisis post hoc de los ensayos mostró como desenlace clínico los eventos cardiovasculares y cerebrovasculares combinados, sin otra especificación del riesgo cardiovascular 36, El metaanalisis de Kearney et al 28 no evidenció diferencia en la incidencia de eventos cerebrovasculares con los AINEs. Recientemente, Haag et al 37 han evaluado a 7.636 individuos con edad promedio de 70,2 años, de los que un 61,3% era conformado de mujeres, sin manifestación de isquemia cerebral previa (1991-1993), para incidencia de accidente cerebrovascular (ACV) hasta septiembre de 2004. En 70.063 personas/año de seguimiento (promedio = 9,2 años), 807 individuos desarrollaron ACV (460 isquémicos, 74 hemorrágicos y 273 no especificados). Los usuarios habituales de AINEs no selectivos (HR 1,72; IC 95%; 1,22 a 2,44) y de inhibidores selectivos de la COX-2 (HR 2,75; IC 1,28 a 5,95) tuvieron mayor riesgo de ACV, sin embargo, no aquello que tomaron inhibidores selectivos de la COX-1 (HR 1,1; IC 0,41 a 2,97). El hazard ratio para ACV isquémico fue de 1,68 (1,05 a 2,69) para agentes no selectivos, y de 4,54 (2,06 a 9,98) para los selectivos de la COX-2. Considerados separadamente, el uso corriente de naproxeno (no selectivo) se asoció a HR 2,63 (IC 1,47 a 4,72) y de rofecoxib (selectivo para COX-2) a mayor riesgo de ACV (HR 3,38; IC 1,48 a 7,74). Los hazard ratios para diclofenaco (1,60; 1,0 a 2,57), ibuprofeno (1,47; 0,73 a 3,00) y celecoxib (3,79; 0,52 a 2,76) fueron mayores que 1,00, pero no alcanzaron significancia estadística. Concluyeron los autores que, en la población general, el riesgo de ACV fue mayor con el uso corriente de AINEs selectivos, pero no limitado a estos, ya que se produce también con los AINEs no selectivos. Insuficiencia cardiaca La adicción de un AINE al esquema terapéutico de paciente en uso de diurético para control de enfermedad cardiovascular, asociada la retención de sodio y agua, aumenta la probabilidad de desarrollo de insuficiencia cardiaca. En un estudio implicando a cerca de 10.000 individuos, con 55 años o más, el uso concomitante de diuréticos y AINEs se asoció al aumento de dos veces en la tasa de hospitalización por insuficiencia cardiaca 38, Pacientes con historia previa de insuficiencia cardiaca congestiva presentaron mayor riesgo 38, Efectos gastrointestinales Los efectos colaterales más importantes de los AINEs se produjeron en el aparato gastrointestinal. Aproximadamente el 20% de los pacientes no toleran el tratamiento con AINEs debido a tales efectos, incluso dolor abdominal, acidez y diarrea 16, El tratamiento a largo plazo puede provocar erosiones y úlceras gástricas y duodenales. Aunque muchos de estos pacientes no tienen síntomas, presenten riesgo alto de desarrollar complicaciones severas, como sangrado y perforación del estómago. El riesgo anual de estas complicaciones severas es del 1% al 4% en el tratamiento crónico con AINEs. Son más suscetibles de presentarlos los pacientes adultos mayores, del sexo femenino, con artritis reumatoides, historia previa de sangrado gastroduodenal, en uso de agentes antitrombóticos o corticosteroides, altas dosis de AINEs y presencia de enfermedad sistémica severa. Estos efectos colaterales resultan del bloqueo de la COX-1 en la mucosa gastrointestinal y en la consecuente inhibición de la producción de prostaciclina, PGE 2 y PGD 2 en el estómago 39, Estas prostaglandinas sirven como agentes citoprotectores de la mucosa gastrointestinal; inhiben la secreción ácida por el estómago, aumentan el flujo sanguíneo local y la secreción de moco citoprotector. En pacientes con gastroduedinitis, úlcera y, sobre todo, sangrado digestivo, se debe usar inhibidores de la bomba de protones (omeprazol, pantoprazol, lanzoprazol etc) diariamente y administrar los AINEs tras las comidas 40, CONCLUSIONES Las evidencias sobre el aumento del riesgo cardiovascular con el uso de AINEs, particularmente de los inhibidores selectivos de la COX-2, son todavía incompletas. Principalmente por la ausencia de ensayos randomizados y controlados con poder para evaluar desenlaces cardiovasculares relevantes. Como las diferencias entre los diversos AINEs son probablemente pequeñas, grandes ensayos clínicos comparativos son necesarios para identificar cual esquema antiinflamatorio minimiza la carga total de los desenlaces cardiovasculares y gastrointestinales adversos. Sin embargo, los resultados de estudios clínicos y de metaanálisis indican que los inhibidores selectivos de la COX-2 ejercen importantes efectos cardiovasculares adversos, que incluyen aumento del riesgo de infarto del miocardio, accidente cerebrovascular, insuficiencia cardiaca, insuficiencia renal e hipertensión arterial. El riesgo de estos efectos adversos es mayor en pacientes con historia previa de enfermedad cardiovascular o con alto riesgo para desarrollarla. En estos pacientes, el uso de inhibidores de la COX-2 se debe limitar a aquellos para los que no hay alternativa apropiada y, aun así, solamente en dosis bajas y por el menor tiempo necesario. Además de ello, más datos son necesarios sobre la seguridad cardiovascular de los AINEs tradicionales 9, Aunque los efectos adversos más frecuentes se relacionen a la inhibición selectiva de la COX-2, la ausencia de selectividad para esta isoenzima no elimina completamente el riesgo de eventos cardiovasculares, de modo que todos los fármacos del largo espectro de los AINEs solamente deben ser prescritos tras consideración del balance riesgo/beneficio.
- Potencial Conflicto de Intereses
- Declaro no haber conflicto de intereses pertinentes.
- Fuentes de Financiación
- El presente estudio no tuvo fuentes de financiación externas.
- Vinculación Académica
- No hay vinculación de este estudio a programas de postgrado.
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Antiinflamatorios no esteroides: efectos cardiovasculares, cerebrovasculares y renales Michel Batlouni
- Publicación en esta colección 22 Set 2010
- Fecha del número Abr 2010
- Recibido 12 Feb 2009
- Acepto 16 Feb 2009
- Revisado 12 Feb 2009
: Anti-inflamatórios não esteroides: Efeitos cardiovasculares, cérebro-vasculares e renais
¿Qué inhibe los antiinflamatorios?
El mecanismo de acción de los AINES clásicos consiste en la inhibición de la COX de manera que impiden la síntesis de distintos eicosanoides a partir de ácido araquidónico.
¿Qué acción farmacológica tiene el ibuprofeno?
El ibuprofeno pertenece a una clase de medicamentos llamados AINE. Su acción consiste en detener la producción del cuerpo de una sustancia que causa dolor, fiebre e inflamación.
¿Qué es inhibicion Sinergica?
En medicina, describe la interacción de dos o más medicamentos cuando sus efectos combinados son mayores que la suma de los efectos que se observan cuando se administra cada medicamento por separado.
¿Qué tipo de inhibidor es el paracetamol?
Es un fármaco multidireccional y hay varias vías metabólicas involucradas en su acción analgésica y antipirética. El mecanismo de acción del paracetamol consiste en la inhibición de las ciclooxigenasas (COX-1, COX-2 y COX-3) y la participación en el sistema endocannabinoide y las vías serotoninérgicas.
¿Qué tipo de inhibidor es el naproxeno?
Antiinflamatorio no esteroideo (AINE) del grupo de los ácidos arilpropiónicos ( ibuprofeno, ketoprofeno, flurbiprofeno). Inhibe la ciclooxigenasa 1 y 2 (COX-1 y COX-2) de forma competitiva y reversible, interfiriendo la síntesis de prostaglandinas y tromboxanos.
¿Qué es la inhibición de un fármaco?
Inhibición – Otros fármacos actúan bloqueando los receptores de las células, de forma que las moléculas que existen de forma natural no puedan ejercer su efecto normal. Un ejemplo sería la familia de fármacos denominados betabloqueadores que se usan para tratar enfermedades cardíacas, entre otras.
Cuando un paciente que presenta de presión arterial alta o infarto cardíaco se toma un betabloqueador, el fármaco se une a los betareceptores y los bloquea, lo que significa que las moléculas que existen de forma natural (adrenalina y noradrenalina) no pueden alcanzar los receptores y sobreestimular el corazón.
Los fármacos que son muy específicos para un receptor a menudo tienen un perfil de mejor que el de los fármacos que son menos específicos. Incluso en el caso de fármacos muy específicos, la unión al receptor es temporal y, tras un tiempo, el fármaco soltará el receptor y abandonará el organismo.
¿Cuáles son los fármacos Sinergicos?
Sinergismo. Dos fármacos en administración conjunta producen un efecto mayor que la suma de cada uno de ellos cuando se administran por separado. Adición o suma. La suma del efecto de cada fármaco administrado por separado es igual al efecto que produce la combinación.
¿Qué fármacos podrían tener un efecto sinérgico?
Ciertos medicamentos pueden afectar la actividad de otros cuando se mezclan durante su administración, una interacción farmacológica probable al tomar más de un medicamento al mismo tiempo. Se conoce como interacción farmacológica a la modificación del efecto de un fármaco por la acción de otro cuando se administran conjuntamente.
- Esta acción puede ser de tipo sinérgico (cuando el efecto aumenta) o antagonista (cuando el efecto disminuye).
- De aquí se deduce la importancia de las interacciones farmacológicas en el campo de la medicina,
- Si un paciente que toma dos fármacos va aumentado el efecto de uno de ellos se puede caer en una situación de sobredosis y, por tanto, de mayor riesgo de que aparezcan efectos secundarios,
A la inversa, si ve su acción disminuida se puede encontrar ante falta de utilidad terapéutica por infradosificación. No obstante lo anterior, las interacciones pueden ser buscadas para conseguir un mejor efecto terapéutico. Son ejemplos ilustrativos la asociación de la codeína al paracetamol para aumentar su efecto analgésico o la combinación de ácido clavulánico y la amoxicilina para evitar la resistencia de las bacterias al antibiótico,
Igualmente hay que considerar que existen interacciones que aunque desde el punto de vista teórico estén presentes, en la práctica clínica no tienen repercusión de interés. Por su naturaleza, las interacciones farmacológicas tienen interés especial en medicina animal y humana, sobre todo las interacciones que conllevan efectos negativos para el organismo.
El riesgo de aparición de una interacción farmacológica aumenta en función del número de fármacos administrados al mismo tiempo a un paciente. En ocasiones la interacción no es entre dos fármacos, sino entre un fármaco y otra sustancia presente en el organismo (v.g.
- Alimentos, alcohol ), o incluso con una situación especial del mismo, como puede ser una deshidratación,
- Otras veces la interacción no implica al efecto del fármaco, sino que se modifican algunas determinaciones de laboratorio debido a la presencia de un fármaco en la sangre del individuo ( interferencias analíticas ).
Igualmente se puede encontrar una interacción fuera del organismo, previa a la administración, como por ejemplo al mezclar dos fármacos en un suero fisiológico para su administración intravenosa, Por similitud conceptual se verán todas estas situaciones bajo el mismo epígrafe.
¿Que inhibe el acetaminofén?
El acetaminofén produce analgesia por un mecanismo de inhibición de las prostaglandinas en el sistema nervioso central. Produce antipiresis por inhibición en la regulación del calor del hipotálamo, resultando en una vasodilatación periférica e incremento en la disipación del calor corporal.
¿Que inhibe un antiinflamatorio esteroideo?
Los AINE inhiben la síntesis de prostaglandinas (PG) por la ciclooxigenasa (COX), enzima de la cual se han identificado recientemente dos isoformas (COX-1 y COX-2) con diferente función.
¿Qué son los fármacos inhibidores?
Sustancia que impide la acción de una enzima.
¿Qué tipo de inhibidor es la aspirina?
Dirección de esta página: https://medlineplus.gov/spanish/druginfo/meds/a682878-es.html La aspirina prescripta se usa para aliviar los síntomas de la artritis reumatoide (un tipo de artritis causada por la inflamación del revestimiento de las articulaciones), osteoartritis (un tipo de artritis causada por el desprendimiento del revestimiento de las articulaciones), lupus eritematoso sistémico (un trastorno en el cual el sistema inmune ataca las articulaciones y órganos y causa dolor e inflamación) y ciertos otros trastornos reumatológicos (trastornos en los cuales el sistema inmune ataca partes del cuerpo).
La aspirina sin prescripción se usa para bajar la fiebre y aliviar el dolor leve a moderado causado por dolor de cabeza,, períodos menstruales, artritis, dolor en los dientes y dolores musculares. La aspirina sin prescripción también se usa para prevenir ataques cardíacos en personas que tuvieron un ataque cardíaco en el pasado o que tienen angina (dolor en el pecho que se presenta cuando el corazón no recibe suficiente oxígeno).
La aspirina sin prescripción también se usa para reducir el riesgo de muerte en personas que tuvieron o han tenido un ataque cardíaco reciente. La aspirina sin prescripción también se usa para prevenir accidentes cerebrovasculares isquémicos (accidentes que se producen cuando un coágulo sanguíneos bloquea el pasaje de sangre hacia el cerebro) o miniaccidentes cerebrovasculares (accidentes que se producen cuando el flujo de sangre hacia el cerebro queda bloquea por un corto período) en personas que han tenido este tipo de accidentes o mini-accidentes cerebrovasculares en el pasado.
- La aspirina no previene los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos (accidentes causados por hemorragias en el cerebro).
- La aspirina pertenece a un grupo de medicamentos llamados salicilatos.
- Su acción consiste en detener la producción de ciertas sustancias naturales que causan fiebre, dolor, inflamación y coágulos sanguíneos.
La aspirina está también disponible en combinación con otros medicamentos como antiácidos, analgésicos y medicamentos para la tos y el resfrío. Esta monografía solamente incluye información sobre el uso de aspirina sola. Si está tomando una combinación de productos, lea la información que viene en el paquete o la prescripción escrita o pídale más información a su farmacéutico.
La presentación de la aspirina prescrita es en forma de tableta de liberación lenta (acción prolongada). La presentación de la aspirina sin prescripción es en tabletas regulares, tabletas de liberación retardada (libera el medicamento en el intestino para prevenir daños en el estómago), tabletas masticables, polvo y como goma de mascar para tomar por vía oral.
La aspirina prescrita suele tomarse dos o más veces al día. La aspirina sin prescripción suele tomarse una vez al día para disminuir el riesgo de ataque cardíaco o de accidente cerebrovascular. La aspirina sin prescripción suele tomarse cada 4 a 6 horas según sea necesario para tratar la fiebre o el dolor.
Siga atentamente las instrucciones que se encuentran en la etiqueta del paquete o en la receta médica y pida a su médico o farmacéutico que le explique cualquier parte que no comprenda. Tome la aspirina exactamente como se lo indicaron. No tome una cantidad mayor o menor del medicamento, ni lo tome con más frecuencia de lo que se indica en la etiqueta del paquete o lo que indica la receta de su médico.
Trague las tabletas de liberación lenta enteras y con un vaso lleno de agua. No las rompa, triture ni mastique. Trague las tabletas de liberación retarda con un vaso lleno de agua. Las tabletas masticables pueden masticarse, triturarse o tragarse enteras.
- Tome un vaso lleno de agua inmediatamente después de tomar estas tabletas.
- Pregúntele a su doctor si debe darle aspirina a niños o adolescentes.
- La aspirina puede provocar el síndrome de Reye (un trastorno grave en el cual se produce acumulación de grasa en el cerebro, hígado y otros órganos del cuerpo) en niños y adolescentes, especialmente si tienen un virus como varicela o gripe.
Si ha tenido una cirugía bucal o si le han extirpado las amígdalas en los últimos 7 días, converse con su doctor sobre qué tipo de aspirina es segura en su caso. Las tabletas de liberación retardada comienzan a actuar un tiempo después de haberlas tomado.
No tome las tabletas de liberación lenta para la fiebre o el dolor que debe ser aliviado rápidamente. Deje de tomar aspirina y llame a su doctor si su fiebre se mantiene por 3 días, si el dolor continúa por más de 10 días, o si la parte de su cuerpo que le producía dolor se torna enrojecida o se inflama.
Usted puede tener un trastorno que requiera tratamiento médico. La aspirina también se usa para tratar la fiebre reumática (un trastorno grave que puede desarrollarse después de una infección de la garganta por estreptococos y que puede causar inflamación de las válvulas cardíacas) y la enfermedad de Kawasaki (una enfermedad que puede causar problemas cardíacos en los niños).